Ayer martes, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, centro del país, ordenó la medida transitoria de suspender temporalmente los efectos de la destitución del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, apenas horas después que la Procuraduría General de la Nación ratificara la decisión tomada contra el funcionario a fines de 2013, generada en la lucha de Petro contra las mafias de la basura.
Ese mismo Tribunal deberá adoptar una decisión de fondo en los próximos diez días sobre un recurso de amparo, que busca proteger los derechos de los votantes que eligieron a Petro a finales de 2011.
La Procuraduría General ratificó este lunes la decisión que destituyó e inhabilitó al alcalde por "tres faltas disciplinarias gravísimas, dos de ellas a título de dolo y una a título de culpa gravísima".
Esas faltas tienen que ver con la implantación de un nuevo esquema para la recolección y disposición de basuras en Bogotá, en diciembre de 2012, lo cual produjo un caos de tres días con los residuos en esta ciudad de ocho millones de habitantes.
"Justicia y multitudes le han ganado la batalla a la arbitrariedad", dijo Petro tras conocer la noticia ante los simpatizantes en la Plaza de Bolívar para expresarle su apoyo.
El alcalde expresó también su "alegría por una noticia que muestra que si la justicia y las multitudes van de la mano se puede detener la tiranía, la arbitrariedad, se puede construir realmente una Colombia democrática y pacífica que son los objetivos que nos hemos propuesto".
Santos en suspenso
Petro introdujo un amparo aduciendo que su destitución vulnera la voluntad popular
Cerca de 400 recursos de amparo fueron presentados en contra de la decisión de destituir a Petro e inhabilitarlo por 15 años para ejercer cargos públicos, una medida que depende de la aprobación final por parte del presidente del país, Juan Manuel Santos.
Pero el Tribunal Administrativo de Cundinamarca le pidió al presidente Santos que se abstenga de destituir a Petro mientras los jueces que estudian el recurso de amparo deciden si protegen o no los derechos de los votantes que lo eligieron como alcalde de Bogotá para un período de cuatro años.
Esta suspensión de la sanción reactiva, por ahora, la posibilidad de que el 2 de marzo se realicen unas elecciones para saber si los electores revocan o no el mandato de Petro, que debería concluir el 31 de diciembre de 2015.
El colaborador de BBC Mundo en Bogotá, Hernando Salazar, informó que la confirmación de la destitución de Petro, un ex guerrillero del M-19 que fue un exitoso parlamentario y un controvertido alcalde, produjo reacciones encontradas en Colombia, que se reflejaron a través de las redes sociales.
A través de su cuenta en Twitter, Petro reiteró que su destitución por parte del procurador "es un golpe de Estado que está arbitrariamente dando contra el voto popular en Bogotá".
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