La Cámara de Comercio difundió la Encuesta de actividad de comercio y servicios del último trimestre de 2010. En el informe sostuvo que las expectativas para este año continúan siendo positivas, dado el período de expansión por el cual atraviesa la economía local y regional.
Sin embargo, advirtió que se mantienen puntos de preocupación que surgen de la continua pérdida de competitividad de la economía uruguaya, producto de la depreciación del dólar y la inflación.
Señaló dentro de estos aspectos el incremento de los costos de la mano de obra junto con las dificultades para obtener trabajadores capacitados para algunos sectores productivos.
También indicó que otros elementos de preocupación son la fuerte presión fiscal que se mantiene en la economía y en las empresas privadas en particular, y la regulación del mercado el cual fomenta la competencia desleal.
El informe destacó que la actividad económica mostró un fuerte dinamismo en la mayoría de los sectores, impulsada por el crecimiento de la demanda interna, principalmente de bienes de consumo y de las exportaciones en un contexto de expansión del comercio exterior.
A su vez, el incremento real de ventas se sigue observando en la mayoría de los rubros, principalmente en bienes duraderos de carácter importado.
Por eso, señaló el informe, en el cuarto trimestre de 2010 se observaron las mayores tasas de crecimiento respecto al año anterior, el cual había sido muy destacado.
Pero aclaró el escrito que "de todas formas hay que resaltar que dicho incremento no se reflejó de la misma manera en los márgenes de rentabilidad de las empresas, debido al crecimiento sostenido de los costos salariales y no salariales que debe afrontar el sector".
Por este motivo, si bien las expectativas de los comerciantes continúan siendo positivas por el buen desempeño de las variables económicas, algunos factores pueden repercutir negativamente.
Entre ellos se señalaron el incremento de las tarifas públicas, la fuerte presión tributaria que continúa en la economía y los continuos ajustes de las remuneraciones que han determinado un incremento de la masa salarial por encima del crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI).
La encuesta expresó que, si bien la conflictividad laboral se redujo en los últimos meses, igualmente fue una constante a lo largo de 2010 y "continúa estando presente en la medida que muchos sectores no han logrado cerrar acuerdos".
Otra limitante constatada por la Cámara de Comercio fue la dificultad para obtener mano de obra calificada, haciéndose más notoria en sectores donde se requiere alta especialización en la tarea a desarrollar.
El informe señaló que "otro factor que se presenta como una limitante al crecimiento de la actividad es la fuerte regulación del mercado junto con la regulación laboral, lo cual perjudica a la actividad económica de los establecimientos formales, fomentando el informalismo y la competencia desleal".
Otras preocupaciones esgrimidas por la gremial empresarial fueron los "crecientes costos de la mano de obra y el incremento de los precios de la materias primas, todo lo cual repercute en forma negativa en los márgenes de rentabilidad de las empresas".
Dentro del crecimiento indicado se destacaron los rubros de automotores, electrodomésticos y vestimenta y venta de materiales eléctricos.
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