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domingo, 19 de enero de 2014

URUGUAY: SE ACERCAN LAS ELECCIONES Y TODOS BUSCAN CORTAR ALGUNA CABEZA DE LAS FILAS CONTRARIAS (Y LAS PROPIAS)

El semanario de derecha Búsqueda, coherente en su apoyo al partido rosado, agitó las aguas de la política nacional al anunciar en portada y desarrollar en páginas interiores, reflexiones del Coordinador de Gabinete del Ministerio de Transporte y Obras Públicas y "mano derecha" del Ministro Enrique Pintado, el Psicólogo Andrés Copelmayer, quien en su Facebook, había salido con mucha dureza ante el pedido de "autocrítica seria" de otros grupos del partido de gobierno.


"Triste muy triste compañeros. El grupo de los 8, como la derecha, tira todo los perdigones contra Astori. Nada más ni nada menos que contra Danilo quien siempre demostró lealtad con el FA y nunca cobró nada por haber sido decisivo en los 2 triunfos del FA y en la exitosa gestión de ambos gobiernos. Construyendo en equipo, transformó la patria financiera en un país productivo que funciona en torno a los valores del mundo del trabajo. Si seguimos así vamos a terminar como los 8 de MOMO, una caricatura del FA fundacional que le entregará la llave del país otra vez a la aristocracia neoliberal empujada por los nuevos ricos del progresismo. Exonero al MPP porque no hizo declaraciones en Búsqueda, que extrañamente parece haberse transformado en el órgano de comunicación oficial de la izquierda", comenzaba diciendo Copelmayer en su FB, para luego ir encargándose de varios de los dirigentes del FA en cuestión, pero dedicándoles quizás la mayor cuota de energía con artillería "pesada" a dos de ellos: Sendic y Lorier.

Acerca del ex Presidente de ANCAP y uno de los firmes candidatos a acompañar en la fómula presidencial a Tabaré Vázquez escribió: "Dijo Sendic, supongo que con cara de poker, " hay que saber escuchar a los compañeros del propio gobierno cuando quieren aportar". Bien dicho Raúl, 3 años más el cierre de PLUNA le costó al Presidente convencerte que te dejaras de embromar con la paramétrica esotérica que aplicabas al combustible de los aviones, que era el más caro e impredecible de la región y que perjudicaba a Carrasco en el objetivo de transformarse en aeropuerto hub de la región. Y no te cobramos nada porque muchos años en un mismo cargo de poder marean o cegan. Tampoco cuando te metiste a querer gestionar AFE de afuera y mirá como está. Tu si tenés 20 millones de razones para la autocrítica. los mismos que autorizaste fiar a Pluna SA con cheques sin fondo a 180 días. Pero como buen neo frenteamplista te hiciste el distraído, te lavaste las manos y cortaste cabezas abajo. Y todavía te atribuís el mérito de que los Campiani estén en cana. No Sr. Ni el fiscal ni la jueza dedicaron un solo párrafo al clavo de 20 palos verdes que te dejaste clavar".

Copelmayer, al decir: "3 años más el cierre de PLUNA le costó al Presidente convencerte que te dejaras de embromar con la paramétrica esotérica que aplicabas al combustible de los aviones" se refiere de alguna forma a los años en los que Sendic en la presidencia de ANCAP, se hizo el distraído e inclusive llegó a intentar confundir a las autoridades de la mismísima IATA con respecto al precio del combustible para aviones que vendía ANCAP en Uruguay, como lo denunciamos en este PDA en el artículo: Lo que hasta ahora no se dijo sobre Sendic en el caso Pluna

Con respecto a las declaraciones del senador comunista Eduardo Lorier, Copelmayer escribió: "Dijo Lorier: "ojalá hubiesemos sido escuchados". Claro que te escuchamos, si fuiste a reunirte junto al embajador de Venezuela con el MTOP porque tenías todo arreglado para que Conviasa se presentara a la subasta, comprara los aviones y tomara a los ex trabajadores de Pluna. Te acordás? Avalaste el proceso, Conviasa compró el pliego de la subasta, vos cacareaste en todos los medios y después nunca vinieron. Nadie te pidió autocrítica ni te cobró nada porque esas cosas pasan."

Copelmayer también "se encargó" del senador Daniel Martínez, seguro candidato del FA a la Intendencia de Montevideo para 2015 y puso en su Facebook: "Dijo D. Martinez " no hay peor consejero que la soberbia y en algún momento faltó valorar otro menú de posibilidades". Te pregunto: tú no integras la Comisión de Transporte del Senado? no votaste y fundamentaste todas las leyes de Pluna que mandó el Ejecutivo? Si solo lo hiciste x disciplina partidaria o x seguir al Presidente nadie se enteró. Tú no sos correligionario de Pedro Apesteguía, abgnegado luchador de esta salida, que cuando se termine la saga verán que trajo más soluciones que problemas? Porqué no le pasaste a él, que es de tu cuadro tu menú de opciones? Las tenías realmente?".

Cuando fuimos invotados el año pasado a "Poder Ciudadano" cuando aún se emitía por Televisión Nacional, le dijimos a los colegas Nogueira y Romano que el cierre de Pluna había sido el peor error desde que la izquierda gobierna al país y ambos colegas nos miraron con cara de asombro.

Muchos interesados siguen repitiendo como loros que Campiani dejó un pasivo de más de 300 millones de dólares, olvidándose sistemáticamente de señalar los activos que rondaban los 290 millones. Pero lo que nadie se anima aún a evaluar es lo que REALMENTE le va a costar al país la herejía que significa el cierre de Pluna.

Además de los juicios que va a perder seguramente, de la depreciación de los 7 malditos (los aviones Bombardier), de haber tirado por la borda un "valor llave" de una empresa con bandera blanca de más de 75 años de vida y de varios items más, nosotros les recordamos que ya ha transcurrido un año y medio del fatídico 5 de julio de 2012 y si Pluna, por el sólo hecho de existir, de operar, en los últimos años generaba aproximadamente 200 millones de dólares para la economía uruguaya por impuestos, tasas, empleo, compras a proveedores, divisas por turismo, etcétera, los números rojos ya van en 300 millones de dólares pero esta vez, sin contrapartida...

Portal de América

http://www.portaldeamerica.com/index.php/zonas-del-portal/editorial/item/16731-sendic-es-un-neo-frenteamplista-que-tiene-un-clavo-de-20-palos-verdes-por-pluna

NOTA DE READACCION: En relación a las afirmaciones de la publicación portaldeamerica cabe decir que se debe leer lo que publicamos a continuación, que se leyera días pasado en el diario El Observador y que demuestran que las cosas no eran tan fáciles como estas personas afirman:

Antes de que cayera la mala noticia de los juicios millonarios que exempleados de Varig, desde Brasil le ganaron a Pluna, los acosadores números rojos con los que la empresa había quedado luego de que se fue Campiani, fue lo que llevó a tomar la decisión de cerrar la aerolínea de bandera.

Esto se desprende de la investigación realizada para el libro Pluna. La caja negra, que se publicó este lunes con El Observador.

El despido de tres millones de dólares de Matías Campiani acompañado por un acuerdo que comprometió al Estado a no perseguir a Leadgate y a sus socios por deudas generadas en su gestión, dejó a representantes del Estado de cara a la realidad de Pluna de la que habían sabido poco pese a tener representantes en el directorio.

Tres días después de la salida de Campiani, quedaron al frente de Pluna Sociedad Anónima Pedro Apezteguía (entonces director de Secretaría del Ministerio de Economía), Pablo Ferrer (en ese momento director de Secretaría del Ministerio de Transporte), Marcelo Alonzo (un funcionario de esa secretaría) y los directores públicos que ya estaban en el ente autónomo, Fernando Pasadores e Ignacio Berti.

Mantuvieron como generente a uno de los socios de Leadgate, Sebastian Hirsch quien conocía la realidad de Pluna al dedillo. A él le pidieron un informe urgente sobre la situación general de la compañía y Hirsch les expuso la realidad sin ningún ocultamiento. Aunque se habían preparado para lo peor, los directores estatales casi no podían creer la gravedad del balance. “Estamos jodidos”, le dijo Apezteguía a Ferrer. La compañía había ingresado técnicamente en lo que se conoce como insolvencia financiera y patrimonial.

 Las sonrisas de aquella firma que selló la asociación con Leadgate en 2007, se transformaron en preocupación. Más aun, temor. “Te queremos mucho, pero en cana no vamos a ir”, le dijo Apezteguía, uno de los nuevos directores estatales de Pluna, al ministro Pintado. No querían firmar cosas por las que después la empresa no pudiera responder, ni tampoco querían recurrir a artilugios financieros para que los aviones siguieran volando.

Fueron tres semanas de administración a puro vértigo mientras se aguardaba una respuesta de la canadiense Jazz, minoritaria en el paquete accionario, para ver si se animaba a hacerse cargo de la compañía.

Para peor, los tiempos apuraban, ya que la ley que regula el proceso de quiebra de las empresas establece que desde el momento que los directores de una compañía toman conocimiento de esa situación tienen 30 días para reconocer la insolvencia ante la Justicia o bien intentar recuperar el patrimonio necesario para seguir funcionando.

Si decidía asumir la quiebra, el gobierno debía cancelar en el acto la deuda de US$?137 millones por los siete aviones Bombardier, ya que así se establecía en la garantía ofrecida al Scotiabank. Era una cláusula de aceleración para saldar la deuda, algo normal en los contratos celebrados por los bancos que siempre buscan salvar su garantía.

 Si, en cambio, decidía recuperar la empresa, el gobierno debía aceptar que la Justicia concursal designara un administrador sin ninguna experiencia en manejo de aerolíneas para que se hiciera cargo del futuro inmediato de Pluna.

En paralelo, los canadienses de Jazz mandaron negociadores a Uruguay para explorar la posibilidad de quedarse con la compañía. Pero resultaba evidente que no sabían muy bien en qué negocio los había metido Campiani. Por ejemplo, uno de los hombres de Jazz, al que le suspendieron las vacaciones para que viajara a Uruguay, preguntó cuántas vacunas tenía que darse para entrar al país, quizá imaginándolo como selva tropical.

No era de extrañar que, en semejante escenario de confusión, apareciera una vez más el empresario Juan Carlos López Mena, quien se contactó con Jazz para ofrecerse como lazarillo en el lejano país sudamericano y negociar el pasaje del 75% de las acciones que estaban cotizadas con el valor simbólico de US$?1.

Pero, solo siete días después de que los directores de Pluna conocieran la insolvencia financiera de la empresa, llegó una noticia inesperada que paralizó todas las negociaciones. En Brasil, un juez dio la razón a dos extrabajadores de Varig, y dispuso que Pluna les pagara US$?1,5 millones en total al entender que la aerolínea de bandera uruguaya y la brasileña, ya desaparecida, conformaban un mismo grupo económico.

Entre 1995 y 2005, Pluna y Varig estuvieron asociadas, relación que terminó en medio de la crisis en la que se vio sumida la aerolínea brasileña.

“Existen 216 reclamos laborales iniciados por exfuncionarios de Varig contra Pluna, en base al concepto de grupo económico. No es posible determinar el monto total de los reclamos, ya que los demandantes han optado por dejar a determinar en instancias de liquidación los montos a pagar. Las contingencias antes mencionadas se enmarcan en el acuerdo para el cierre de la transacción celebrada entre Pluna, el Estado uruguayo y los accionistas privados el 13 de junio de 2007, que consagra la responsabilidad del Estado uruguayo en todas las contingencias generadas con anterioridad al 30 de junio de 2007”, había advertido el informe de la última auditoría realizada en Pluna. Hablando en plata, el Estado uruguayo se exponía a juicios millonarios.

A todo ello se sumó un cambio de criterio en la legislación laboral de Brasil, que permitía a los trabajadores demandantes no identificar a qué socio del grupo económico recurrir para el cobro ni cuánto les correspondía cobrar, lo cual quedaría a disposición del juez. Producto de esos primeros juicios ganados en Brasil contra Pluna, la Justicia norteña embargó las cajas de la aerolínea en aquel país.

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