Un ómnibus eléctrico realizará los recorridos de 4 líneas de transporte urbanas la próxima semana, para probar la capacidad de autonomía, velocidad y consumo de este tipo de vehículos en las calles montevideanas. Más adelante se probarán motocicletas para el uso de deliveries y taxis.
El ensayo será el primero en su tipo en una acción conjunta entre UTE, la Intendencia de Montevideo (IM), el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) y las empresas de transporte colectivo.
Los recorridos del ómnibus se cumplirán sin pasajeros pero el vehículo llevará bidones de agua que pesarán lo mismo que la carga promedio que soporta un ómnibus en funcionamiento.
El bus eléctrico seguirá a una unidad común (con motor de combustión), de la misma línea y se detendrá en todas las paradas detrás del otro coche. No obstante, Cutcsa no descarta efectuar el recorrido con pasajeros.
Las líneas elegidas fueron propuestas por las empresas. UTE dotará al coche de GPS y luego procederá al estudio de la información.
El objetivo a futuro es la incorporación de ómnibus eléctricos a la flota de las empresas de transporte público para reducir el consumo de combustibles fósiles y evitar la generación de gases de efecto invernadero.
Un motor eléctrico genera 71 gramos de dióxido de carbono –el principal gas responsable del efecto invernadero– por cada kilómetro; mientras que un coche alimentado por nafta súper 95 produce 217,3 gramos. Un motor a gas oil genera 182,3 gramos.
Autos verdes
En Uruguay circulan solo 4 vehículos eléctricos. Uno de ellos es una camioneta de UTE. Otro es el llamado 'Pepe móvil', el utilitario que utilizó el presidente José Mujica el día de su asunción. La Policía vendió uno que usaba para patrullar la Ciudad Vieja. Y el cuarto es utilizado por una empresa privada (Alberto Gandulia S.A.).
Fernando Costanzo, en representación de la gerencia del sector Mercado de UTE explicó ayer en el 3º Foro Nacional de ciudades Sustentables organizado por la Cámara de Comercio e Industria Uruguayo-Alemana, que el coche posee una autonomía de carga de 140 kilómetros.
Su batería es de ion de litio, una tecnología más estable que el plomo ácido.
'No tenemos miedo de quedarnos en la calle sin energía', dijo.
Su capacidad es 26 kilowatt hora (kWh) y el 80% de la carga se realiza en cinco horas. La velocidad máxima alcanzada es 120 kilómetros por hora.
La experiencia ha sito tan positiva para UTE que se embarcó en un plan de renovación de su flota liviana. En 2014, 30 furgones (8 % del total) serán eléctricos pero, más adelante, se quiere convertir 360 unidades. La inversión de la primera fase rondará los US$ 2 millones.
'El costo unitario del vehículo eléctrico es menor que el vehículo con motor de combustión interna', apuntó Costanzo. Uno eléctrico requiere menos mantenimiento. Por ejemplo, no necesita cambio de aceite.
Además, el técnico señaló que supone un gasto de US$ 0,032 por kilómetro. Esto es 83 % menos que el de un motor a nafta.
De todas formas, la conversión de un auto común a uno eléctrico todavía es cara.
Gabriel González Barrios, director de la organización Autolibre que transformó la camioneta de UTE, dijo al diario El Observador que cuesta entre US$ 10.000 y US$ 15.000.
'Hay que lograr que quiten los impuestos a los componentes o impulsar la creación de una industria nacional', expresó. El valor de los componentes es de US$ 6.000; el resto son los gravámenes del estado.
En cuánto a la recarga, desde UTE se aseguró que no será onerosa si se realiza a partir de las 23 horas cuando la electricidad es más barata.
La proyección del ente es que el mercado uruguayo podrá disponer de 60 mil autos eléctricos para el año 2030 (el 10% del parque automotor actual).
Si todos se cargaran al mismo tiempo necesitarían una potencia de 210 megawatts (MW). Pero Costanzo explicó que podrán ser abastecidos con un parque eólico de 55 MW ya que no todo el mundo pondría a cargar el vehículo a la misma hora.
Un vehículo de uso urbano circula, en promedio, 45 kilómetros por día, por lo que necesitaría ocho horas de carga.
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