Apryl Michelle Brown, de 46 años y madre de dos chicos, sufrió varias amputaciones de sus miembros luego que se inyectara un producto comprado en el mercado negro. Según su testimonio al diario The Sun la mujer intentaba mejorar la forma de sus glúteos y para ello compró una inyección de silicona. Resultó ser sellador de baño.
Como consecuencia la terminó con la amputación de sus dos nalgas, brazos y piernas además de estar al borde la muerte. 'Pagué un terrible precio por mi vanidad y lo pagaré el resto de mi vida', dijo.
La mujer, oriunda del estado de California, pagó más de US$ 900 por dos inyecciones de silicona industrial. 'No realicé ningún tipo de investigación. Confié en ella (la vendedora), porque parecía tan profesional y no tenía razones para pensar que algo malo pudiera ocurrir', relató.
La mujer se sometió a dos sesiones de inyecciones antes de abandonar el supuesto tratamiento.
Durante los siguientes dos años comenzó a sufrir intensos dolores antes de finalmente acudir por atención médica. Michelle Brown debió someterse a 27 operaciones, que incluyeron diversas amputaciones y varios injertos de piel en su cuerpo.
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