La atroz ejecución fue presenciada por Kim Jong-Un y otros 300 integrantes de la cúpula del régimen comunista, según el diario británico Daily Mail.
En general, las ejecuciones de prisioneros políticos en Corea del Norte se realizan con armas de fuego, "esta sentencia extraordinaria parece haber sido guardada especialmente para los más odiados en la sociedad norcoreana", agrega el diario.
En su discurso de Año Nuevo transmitido en vivo por la televisión pública, el líder norcoreano justificó la ejecución de su influyente tío y lo calificó de "escoria".
"El año pasado se tomó la decidida medida de sacar facciones de escoria disidente del partido (.) y esta purga anti partido y anti revolucionaria lo ha fortalecido ", dijo Kim durante un mensaje de 25 minutos.
El régimen de Pyongyang confirmó el pasado 13 de diciembre la ejecución de Jang Song Thaek, mentor del actual líder, y lo acusó de traición y corrupción, entre otros muchos delitos.
El sorprendente ajusticiamiento del que fue considerado el "número dos" del régimen supone el mayor cambio político desde la muerte del dictador Kim Jong-il, en diciembre de 2011, que abrió las puertas del poder a su hijo.
Hasta su caída en desgracia, Jang ostentaba varios cargos en el Partido de los Trabajadores, brazo político del régimen, entre ellos el de vicepresidente de la poderosa Comisión Nacional de Defensa.
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