-- --

Buscar información

Facebook y Twitter

domingo, 10 de noviembre de 2013

M. MELLO: LA TRICAMPEONA SUDAMERICANA DE JABALINA NO PUEDE ALIMENTARSE ADECUADAMENTE POR FALTA DE DINERO

María “Mimí” Mello contó a periodistas del diario montevideano La República, su historia de vida, desde sus inicios en los que competía descalza y escapaba de un entorno barrial muy complicado, hasta su realidad actual y los problemas para poder alimentarse correctamente. Ante estas situaciones uno se pregunta si en lugar de tantos asesores y dinero perdido en aventuras como la de Pluna o en pagar honorarios disparatados como los 450.000 dólares que cobró el abogado que armó el proyecto de ley que ahora fue declarado inconstitucional o lo que cobró otro conocido abogado gubernamental por tramitar el pago del famoso aval de J. C. López Mena que tenía el Brou, no se podría apoyar a estos atletas, a los cuales además el deporte les brinda el encontrar un camino adecuado en la vida, luego de nacer en barrios socialmente complicados.



La realidad del atletismo nacional tiene como una de sus protagonistas de lujo a María Mello, una joven fraybentina de 19 años que supo ganar tres medallas de oro en lanzamiento de jabalina (Sub 15, Sub 18 y Sub 20) entre sus principales logros y que es una de las grandes promesas para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

“Mimí” tiene una historia de vida increíble, de superación, crecimiento, cambio y un presente que muestra en gran parte la escasa contención que tienen nuestros grandes deportistas.

Mello nos contó que llegó al atletismo tras jugar por 6 años en el fútbol infantil: “Era golera e incluso llegué a la Selección de Río Negro, lo que me ayudó a crecer en el deporte.

En la escuela, un día se hizo una búsqueda de talentos y a los catorce años me seleccionó Milton Cardozo (su entrenador) y allí comencé a ir dos veces por semana a entrenar. Probé martillo, disco y por último la jabalina, pero con ella no me llevaba mucho. De a poco me fui adaptando y apenas me inicié en las competencia clasifique al Sudamericano Sub 15 y fui medalla de oro con 14 años, lo que marcó la base de lo que soy ahora”.

De allí en más no paró de crecer, ganando medallas continentales en cuanto Sudamericano participó, también a nivel panamericano y metiéndose entre las mejores en los mundiales de su categoría. A esto hay que sumarle que hasta el día de hoy lleva batido el récord nacional de jabalina en más de 20 ocasiones en las distintas categorías.

“Mimí” cuenta que “comencé compitiendo y entrenando descalza porque no tenía los medios para comprarme los championes para hacerlo”, lo que realizó casi por un año, y explicó que debió sobreponerse a una entorno muy complejo. “Yo vivía en un barrio muy complicado de Fray Bentos (Los Palomares) donde se ven muchas cosas bravas. Es un lugar que no está a la altura del deportista, pero por suerte el atletismo me ayudó a evitar los vicios y flagelos que allí se pueden dar.

La luché los primeros años porque no es fácil, ya que todo tu círculo te lleva, pero el deporte me ayudó mucho a entender qué camino tomar y ahí fue fundamental Milton Cardozo (su entrenador y descubridor) que me ayudó a ser otra persona hoy en día y elegir mi estilo de vida, en este caso como atleta.

De no haber variado el rumbo, nadie me puede asegurar que no hubiera terminado tirada en una zanja. Quiero dar mi ejemplo a los jóvenes que están en una senda difícil, para que se dejen ayudar y acercarlos al deporte”.

La atleta comentó que con menos edad tenía una forma de pensar y actuar muy diferente, “pero Milton me hizo ver el camino, que existe otra vida y que el mundo era mucho más que tomar, fumar o cualquier otra cosa. Conocí mucha gente del atletismo que me guió y hoy en día mi gran medalla de oro es eso, ayudar a esos niños a que se arrimen al deporte y que existe más que una realidad oscura”.

Alimentación

Pero el presente de “Mimí” Mello no dejó de ser bastante complicado y sabe que el futuro es crucial. La Intendencia de Río Negro “siempre colaboró de alguna forma, sobre todo económica. En diciembre ya se acaba ese apoyo y es como volver a dar un paso atrás y quizás dejar de competir y deba empezar a trabajar. En lo personal la sigo luchando cada día, aunque me duele que eso sea una posibilidad porque yo amo representar a Uruguay en el exterior, defender la camiseta y valoro lo que se paga para que pueda viajar cada vez”.
La atleta cuenta que en su casa eran seis hermanos y que se hacía muy difícil “bancar la diaria”.

Explicó que en sus comienzos en el deporte “era una más de la escuela de atletismo y Milton (Cardozo) de su bolsillo me ayudaba a poder sobrevivir. Luego de las primeras medallas comencé a tener un apoyo de la Intendencia, con una pequeña beca para que pudiera comer. Nunca tuve de más, la heladera jamás estuvo a medio llenar, pero nos manejábamos en familia”. Explicó que la comuna fue su único sustento hasta el día de hoy y que por cerca de un año recibió la ayuda de los funcionarios de la empresa Kemira previo a su participación mundialista (2011) y que llegaban a alcanzarme “cinco yogures por semana para que pudiera desayunar, más carne y cereales”.

Pero el tema de la alimentación es una lucha constante que tiene que llevar por delante hasta el día de hoy: “La falta en este aspecto hace que no pueda hacer doble horario porque me falta energía y eso pesa y mucho. Físicamente no estoy bien, pero es todo por la mala alimentación, no puedo llegar en un máximo de condiciones”. También comentó que nunca pudo seguir una dieta acorde, ya que “no puedo comer como corresponde. Almuerzo al mediodía y lo que sobre sirve para la noche. Se zafa con lo que hay”.

Es más, aduce que si bien las becas económicas ayudan, “estaría muy bueno poder recibir una canasta con alimentos, ya que de última el dinero lo voy a usar para eso”. Además reconoció que la ausencia de un nutricionista para guiarla en este aspecto es clave y genera muchos momentos de altibajos.

Psicólogo

María Mello comentó que sufre dislexia y eso siempre la complicó muchísimo a la hora de estudiar. “Era algo muy difícil para mí”, pero igualmente no se rinde y sigue intentando avanzar en este camino, “estoy tratando de terminar tercero de liceo, porque esto no sabes cuándo se termina”. Hace algunos años “Mimí” tuvo su primer experiencia con un psicólogo, Pablo Ferreira, cuando de la mano de su entrenador, Milton Cardozo, decidieron dar ese paso: “él me bancaba todo, fue de gran ayuda”.

Pero con el tiempo no pudo llevar adelante más este camino, el cual retomó el año pasado “gracias a la ayuda del ‘Tato’ (Pablo Sanmartino, presidente de la Confederación Atlética del Uruguay) ya que estaba en un momento de incertidumbre en mi vida. El mismo me sirvió a reencauzar lentamente el camino”.

Lesión

La atleta uruguaya ahora se esta tratando en Montevideo de una tendinitis en el hombro derecho. En su estadía en Montevideo se esta alojando en la casa de Sanmartino, presidente de la CAU y se trata con el Dr. Daniel Zarrillo, quien además es también director de Deportes de la Intendencia de Montevideo. “Me está realizando acupuntura, ozono, láser y demás para mejorar con vistas a los Odesur de marzo próximo”.

Por último, sentenció que su motivación radica en “seguir y querer llegar a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Este año tiré 50 metros y quedé a nueve de la marca clasificatoria. Quiero hacer todo para alcanzar ese sueño”.

“Cardozo, mi segundo papá”

La campeona sudamericana María Mello comenta emocionada, al ser consultada por su entrenador Milton Cardozo, “es como mi segundo papá”: y agrega: “Él estuvo en las buenas, las malas y en cada ocasión que lo precisara. Dejó mucho de su bolsillo por darme una mano y encauzarme en la vida. Sé que no soy una persona fácil, por eso lo valoro mucho más. Si me veía en la esquina me agarraba y llevaba para conversar. Soy lo que soy gracias a él que me dio la posibilidad de decidir entre lo bueno y lo malo y hacerlo bien. Milton es como mi padre y así lo valoro”.

Un cuarto propio

Otra de las muestras de la sencillez y lucha en la vida que lleva por delante Mello es cuando se refiere a la vivienda. “En Los Palomares (su barrio donde nació y se crió) éramos seis hermanos que dormíamos todos juntos en una habitación pequeña. Recién hace tres años, cuando me mudé con mis abuelos, pude tener un cuarto propio, lo cual es increíble. Ahora puedo colgar algunos de los carteles que me dan y las medallas ganadas. Mis abuelos me ayudan con lo que pueden, aunque a veces me siento como un peso para ellos”.

Sus principales logros

2008: Oro en Sudamericano Sub 15 en Montevideo
 2010: Oro en Sudamericano Sub 18 en Santiago de Chile
 2010: Plata en Selectivo Juegos Olímpicos de la Juventud en Brasil
 2011: Finalista en el Mundial de Menores en Francia, finalizando novena
 2011: Plata en Sudamericano Sub 20 en Colombia
 2012: Bronce en Sudamericano Sub 23 en Brasil
 2013: Bronce en Panamericano Sub 20 en Colombia
 2013: Oro en Sudamericano Sub 20 en Chaco, Argentina

- Batió el récord uruguayo unas veinte veces entre todas las categorías y está primera en el ranking sudamericano Sub 20.


No hay comentarios: