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martes, 28 de febrero de 2017

GRECIA: NO SALE DEL PANTANO FINANCIERO Y LA GENTE SE DESESPERA

En épocas normales, en un país normal, los procedimientos judiciales sobre atrasos hipotecarios no serían el tema de las noticias principales. Pero estos no son tiempos normales en Grecia y tales casos han estado haciendo boletines de televisión nacionales. En un edificio de cemento blanco sin alma, los líderes del movimiento 'No Pagaré' han convertido los procedimientos de desahucio de rutina en la primera línea en una lucha popular contra la austeridad.

Los manifestantes - ruidosos y violentos, pero no violentos cuando los vimos - resultan en la fuerza para bloquear el progreso de los casos en que los bancos buscan recuperar las casas donde los préstamos han caído en mora.

Puede ser un acto corto, dramático y eficaz de acción directa.
Personas vs 'máquina'

Por la tarde fuimos a la corte, los manifestantes, cantando y animando, se apiñaron en los bancos judiciales y se derramaron en la caja de testigos.

Un abogado que representaba a un banco se encontró encerrado y rodeado, incapaz de hacer su caso porque no podía hacerse oír.

El caso fue aplazado y los activistas de la vivienda aclamaron y silbaron lo que vieron como una rara victoria para el pueblo griego común sobre una especie de maquinaria internacional de austeridad.
Los manifestantes cansados ​​de la austeridad están tomando las cosas en sus propias manos - aquí la prevención de un abogado que presenta un caso para una recuperación

Las personas comunes tienen que convertirse en activistas para tratar de defenderse de más dificultades, dice el integrante de 'No Pagaré', Ilias Papadopoulous. Añadió: "Más de la mitad del pueblo griego vive en la pobreza por debajo del nivel en el que tiene dignidad, el gobierno no los protegerá, así que estamos aquí para protegerlos".

La victoria, por supuesto, no es definitiva - es difícil creer que el banco va a renunciar a su dinero y es razonable asumir que su abogado volverá a la corte un día pronto.

Pero el caso proporcionó una idea del estado de ánimo popular en un país desgastado por años de austeridad.

Incluso el Comisario europeo de Finanzas, Pierre Moscovici, ha hablado de la necesidad de proporcionar al pueblo griego algún tipo de luz al final del túnel de austeridad. Incluso se ha pronunciado "esperanzado" en el tema.

Pero es difícil encontrar muchos griegos que comparten su parte de optimismo.

En una semana en Atenas conocí a una pareja que planeaba emigrar en busca de trabajo inmediatamente después de su boda el próximo mes, el gerente de una estación de televisión cuyo personal no ha sido pagado por meses y un joven con un MBA trabajando como taxista , Quien nos dijo que no veía "absolutamente ninguna esperanza" para el futuro.

Por lo tanto, el estado de ánimo no podría ser más sombrío como el gobierno griego se prepara para otra ronda en su aparentemente interminable danza con sus principales acreedores internacionales - la zona del euro y el FMI.

Grecia espera que la fórmula anterior por la que se suscribiera a dolorosas reformas económicas a cambio de rescates escalonados podría ahora ser relajada.

En términos generales, la posición griega sigue siendo terriblemente mala.

Su relación entre la deuda y el PBI se mantiene en un 180 % y una esperanza a largo plazo tiene que ser en algún momento al menos parte de esa deuda será amortizada.

A corto plazo, eso es muy improbable. Los líderes de la eurozona se enfrentan a las elecciones de este año en Holanda, Francia y Alemania - no es un buen momento para decir a sus contribuyentes que no van a recibir su dinero de Grecia.

Y el FMI, que simpatiza con una cancelación, sólo querría que ocurriera en el contexto de nuevas reformas estructurales que intentarían poner a prueba la paciencia de los votantes griegos.

"La idea de la reforma se ha vuelto tóxica en Grecia", dice Nick Malkoutzis, editor del influyente sitio web de inteligencia económica MacroPolis, "porque cuando el otro lado dice: 'Esto es lo que debes hacer para poner tu economía en una mejor , Lo que el griego promedio oye es que 'me van a sacar más dinero de mi bolsillo' ".

Sin embargo, el gobierno griego siente un momento de oportunidad en un mundo donde su crisis de deuda ha sido eclipsada al menos por ahora por los dramas de Brexit y la elección del presidente usamericano Donald Trump.

Pretenden impulsar un marco diferente para las negociaciones con sus acreedores, cuando en el futuro las concesiones directas sobre la reforma de las pensiones se equilibrarían, por ejemplo, con una posible reducción de impuestos.

El vicecanciller griego Georgios Katrougalos calcula que lo que él llama una élite global que ya ha sufrido una serie de crisis en los últimos meses no querrá resistirse a provocar la ira del pueblo griego.

"Hay un desencanto general en Europa", me dijo, "especialmente en Grecia porque hemos sido golpeados más duramente por la austeridad.

"Así que la verdadera pregunta ahora es cómo invertir la austeridad y creo que hay esperanza en eso porque creo que la élite sabe que no puede gobernar como lo hicieron antes - la elección de Trump muestra eso y muestra que la gente no consentirá para ser gobernada como era antes. "

No sabremos si el cálculo del ministro es correcto hasta que Grecia comience las negociaciones formales con sus acreedores otra vez.

Si tiene razón, tal vez el estado de ánimo de la penumbra en Grecia podría comenzar a levantarse, pero por ahora, cuando los griegos oyen hablar de "luz al final del túnel" sienten que el túnel permanece terriblemente largo y la luz permanece frustrantemente tenue.

Fuente: BBC



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