Durante enero y febrero el Museo del Carnaval recibe en promedio 10.000 visitantes. Por segundo año consecutivo ofrece espectáculos en su propio tablado de jueves a sábados y ofrece varias muestras permanentes, una de ellas dedicada a los treinta años de Falta y Resto.
Ubicado estratégicamente al lado del Mercado del Puerto, el Museo del Carnaval es una cita obligada para los turistas que visitan nuestro país.
De hecho, el 40 % de los 50.000 visitantes anuales que recibe son extranjeros.
En enero y febrero es un punto neurálgico, sobre todo desde que cuenta con un tablado al aire libre de 1.000 metros cuadrados y otro techado que permite sortear las inclemencias climáticas. Allí se ofrecen funciones de jueves a sábados a partir de las 20.45 horas.
Para ingresar al escenario se debe atravesar el Museo y eso es un atractivo extra. Entre otras cosas el visitante se topa con varias muestras permanentes, una tiendita de souvenirs y un restorán.
Todo lo recaudado se destina al Centro de Documentación y Archivo, que trabaja en forma permanente en la recopilación y recuperación de materiales de todo tipo vinculados al género (fotos, filmaciones, letras, fichas técnicas, trajes y objetos varios), labor que le valió el premio Reina Sofía.
El archivo abarca desde las primeras décadas del siglo XX al presente, es decir que reúne más de cien años de historia.
Una exposición sobre Candombe, otra sobre el Carnaval del siglo XX y un recorrido por máscaras increíbles (titulado "25 años de cara al mundo") figuran entre los principales puntos de interés. La mayoría de estas muestras recorrieron todo el interior y al menos dos veces al año recalan en países del extranjero.
El Museo también trabaja en la recuperación de tablados en diez barrios de Montevideo colaborando con su decoración, una tradición que prácticamente se ha perdido.
"En los años '30 en la capital había más de 300 tablados y todos se decoraban porque había un concurso. Nuestra tarea es volver a eso", explicó Eduardo Rabelino, coordinador de las exposiciones.
Otra moda que se fue quedando en el tiempo son los carros alegóricos. Reclusas que cumplen su condena en Montevideo y Canelones fueron convocadas para la fabricación de estos carros.
"Los mismos fueron usados por las reinas del Carnaval y por las reinas zonales que desfilan en los 18 corsos barriales de la capital. Al mismo tiempo se cumple una función social y este año se incorporó el CNR (Centro Nacional de Rehabilitación Social). Quienes intervienen en este trabajo redimen parte de su pena, buscamos la forma de reinserción en la sociedad; es una manera de que sientan que su trabajo es valorado", destaca.
El Museo se financia mediante un fideicomiso aplicado a la cultura, en el que participan el Ministerio de Turismo, la Intendencia de Montevideo y la Administración Nacional de Puertos. Lo administra la Corporación Nacional para el Desarrollo y tiene como principal sponsor a Ancap. De todos modos, el mayor ingreso es por venta de entradas.
Gira de “Contrafarsa”
Un viaje a través del vestuario de la murga Contrafarsa sigue en gira por el interior del país. En este momento se encuentra en San José, y después llegará a Canelones y Rocha. Con diseños totalmente distintos y propuestas estéticas cambiantes, la niña mimada de Sayago mantuvo un estilo propio que aún es recordado con nostalgia por sus seguidores.
Tablados
Los escenarios populares que estarán decorados durante el Carnaval 2011 son: El tejano Arbolito (Carlos Ma. Indarte 867), Flor de Maroñas (Manuel Acuña 3099), Las Torres, Lavalleja (Av. de las Instrucciones 1435), Molino del Galgo (Pan de Azúcar esquina Timoteo Aparicio), Monte de la Francesa (Lanús esquina Iturbe), Paso de las Duranas (Trápani 1350) y Tablado del Museo (Rambla 25 de Agosto 218).
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