ACCIDENTES EN LA INFANCIA

Un estudio médico realizado en varios departamentos de Uruguay, sobre accidentes en la infancia reveló que el 37% de los accidentes extradomiciliarios ocurren en escuelas y liceos. Sin embargo, los investigadores destacan que el 57% del total de siniestros ocurren en los hogares por descuido de los adultos.



Los accidentes infantiles son la segunda causa de los ingresos hospitalarios, después de las infecciones respiratorias. El 43% ocurrió fuera del domicilio, de los cuales "el 37% se produjo en centros educativos", indica el informe.

Sin embargo, los médicos destacan que la mayoría de los siniestros ocurren dentro del hogar, aunque la tipología es similar. El 57% es producto de caídas de todo tipo, el 15% como consecuencia de "heridas por mecanismo punzante y/o cortante", el 9% por quemaduras, el 8% por intoxicaciones, el 4% producto de mordeduras de animales y el 7% restante se divide entre varios factores.

En el caso de las quemaduras en el 57% de las historias clínicas no figura el lugar en donde se produjo. De lo registrado se concluye que el 98% ocurrió en el domicilio y de estas el 75% en la cocina.

Otro tipo de accidente es el llamado "trauma del deporte", siendo un 3,5% del total, dentro de estos en el 77% de los casos la zona de impacto o lesión fueron los miembros y en el 22% de los casos fue el cráneo, cara o cuello.

En el caso de las mordeduras el 72% ocurrió en el domicilio, el 50% de los niños mordidos presentó lesiones en los miembros, el 47% en cara y cuello, 8% en el tronco y el 5% en más de una zona del cuerpo.

"Un accidente acontecido indica la existencia real de un riesgo, que no detectado anteriormente o no corregido, lo conocemos a través de sus consecuencias.

El presente estudio reafirmó que los "accidentes" son un importante problema de salud para la población infantil tanto en los centros de Montevideo incluidos como en los de dos departamentos del interior del país (Salto y Paysandú)", indica la investigación.

Los médicos asocian los accidentes con la falta de cuidado de un adulto. "La OMS refiere que, si bien la prevención de lesiones por accidentes debe ser un tema prioritario a abordar en todas las consultas pediátricas en salud, los niños de medios más desfavorecidos y sus padres o cuidadores deben recibir una mayor atención en este sentido", aseguran los investigadores.

La investigación titulada "Accidentes en la infancia. Prevalencia, características y morbilidad determinada por los accidentes en una población de Uruguay" fue realizada en torno a varios capítulos por el Departamento de Pediatría de la Facultad de Medicina, en las mutualistas y hospitales de Paysandú, Salto y Montevideo, donde se evaluaron los ingresos y consultas de niños y adolescentes menores de 14 años.

"¿Qué hace a los niños particularmente susceptibles a ser víctimas de "accidentes?", se preguntan los pediatras. "Las capacidades y conductas de los niños difieren sustancialmente de las de los adultos", responden.

"El inicio de la deambulación y la falta de custodia por el adulto constituyen elementos claves para la ocurrencia de accidentes. Además, a medida que el niño se desarrolla, su curiosidad y necesidad de experimentar no siempre van acompañadas de la habilidad de comprender o de responder al peligro, dejándolo expuesto al riesgo de accidentes", aseguran los médicos.

El Programa de Prevención de Accidentes en la Infancia de la Sociedad Uruguaya de Pediatría (SUP) publicó un punteo con los cuidados que los adultos deben tener con los niños y destacó que uno de cada seis niños es atendido por un accidente en los centros de salud.

En el caso de los niños de 0 a 12 meses es frecuente que sufran caídas en sus desplazamientos. Es importante alejar de las cunas los líquidos calientes, así como no dejar a su alcance objetos que puedan llevar a la boca. Los juguetes deben ser adecuados a su edad y no pueden ser desarmados en pequeñas partes.

En los niños de 1 a 3 años su mayor capacidad de desplazamiento los vuelve propensos a sufrir accidentes. Además, se debe tener cuidado con las intoxicaciones debido a la ingesta de insecticidas, medicamentos, kerosene, detergente, entre otros.

Guardar estos productos con llave, en lugares altos y no tomar medicamentos frente al niño. De 3 a 6 años el niño es más independiente, trepa, salta, corre y disfruta de juegos de mayor riesgo.

"Las piscinas resultan atractivas, por lo que se deberá prestar especial atención cuando éstos jueguen alrededor o dentro de ellas, manteniendo una supervisión adulta permanente.

En la playa, siempre debe haber un adulto por niño que juega en el agua, aún en el caso que sepan nadar", recomiendan.

En el caso de los niños de 6 a 10 años, los médicos destacan que "los accidentes son más frecuentes a la entrada y salida de la escuela y cuando el tiempo está malo. Los niños hiperactivos son más propensos".

De 10 a 14 años se recomienda varias medidas para transitar en la calle, así como los juegos y el tránsito en bicicleta entre otros.