Son 2.553 las personas que viven en situación de calle en Montevideo, de las cuales 855 duermen a la intemperie y 1.668 en refugios, informó este viernes el Ministerio de Desarrollo Social (Mides). La cifra se desprende del relevamiento que la cartera realizó entre el 20 y el 21 de julio, en conjunto con el Instituto Nacional de Estadísticas y Naciones Unidas, a partir de la recorrida de 86 zonas identificadas como de alta y mediana densidad de personas en situación de calle.
En comparación a abril de 2019, la cantidad de personas en situación de calle en la capital aumentó 25,3%, pero disminuyó 15,1% el número de quienes duermen a la intemperie. Según la cartera, esa variación se debe al aumento de los cupos en los refugios.
Desde que en marzo Pablo Bartol asumió como ministro de Desarrollo Social, se habilitaron cerca de 500 plazas, de las cuales 300 son para personas con enfermedades prevalentes o adultos mayores. En el relevamiento de 2019, 16% de los encuestados dijo que no asistía a un refugio por falta de cupos, mientras que ese motivo solo fue traído a colación por 8% de las personas relevadas en 2020.
El perfil de la población a la intemperie se mantiene "muy similar" al de anteriores censos, según el Mides. De las personas que accedieron a responder la encuesta, nueve de cada 10 son varones y tienen 39 años en promedio, 54% estuvo preso y un 30% declaró tener problemas de salud mental o haber estado internado en el pasado.
Se constató una "sobrerepresentación" de la población afrodescendiente, siendo 3 de cada 10 encuestados. En la medición de 2020 la pasta base figura como la droga más cosumida, por encima del alcohol.
El 48% de los encuestados dijo que está en situación de calle desde hace menos de un año y 12%, desde hace menos de un mes. En este relevamiento se incluyó una nueva categoría para medir el impacto de la emergencia sanitaria por covid-19, que reveló que 58% de las personas en situación de calle perdió fuentes de ingresos y 27% redujo su trabajo desde el 13 de marzo.
En cuanto a los vínculos, 65% de las personas duermen solas en la calle y más de la mitad (56%) está en contacto con personas que no están en su misma situación. En el último año aumentó el apoyo proveniente de vecinos de la zona (53% dijo haber recibido algún tipo de ayuda de este tipo), pero más de la mitad declara haber sufrido agresiones de algún tipo estando en la calle. Aproximadamente 66% tiene trabajos informales y precarios; la mitad de quienes están desempleados busca trabajo.
Bartol señaló que la persistencia de personas en situación de calle es un "problema endémico”, que en 2020 pegó "un salto considerable”. Sin embargo, destacó la respuesta del Mides que abrió nuevos cupos, muchos de ellos en centros que funcionan las 24 horas y no solo durante la noche.
El ministro dijo que "es necesario hacer mucho más" para abordar el problema en conjunto con otros organismos del Estado. "Dar más y mejores respuestas para, como dice el presidente, no dar a ningún uruguayo por perdido", resumió en la conferencia de prensa.
La coordinadora residente de Naciones Unidas en Uruguay, Mireia Villar, anunció que en las próximas tres semanas este organismo trabajará con el gobierno para definir “el marco de cooperación 2021-2025”.
Este período coincide con la elaboración del proyecto de ley de Presupuesto. Consultado por este tema, Bartol dijo que "está todo a discutir" y que no ha habido "una decisión sobre el número final" que va a presentar el Poder Ejecutivo.
En comparación a abril de 2019, la cantidad de personas en situación de calle en la capital aumentó 25,3%, pero disminuyó 15,1% el número de quienes duermen a la intemperie. Según la cartera, esa variación se debe al aumento de los cupos en los refugios.
Desde que en marzo Pablo Bartol asumió como ministro de Desarrollo Social, se habilitaron cerca de 500 plazas, de las cuales 300 son para personas con enfermedades prevalentes o adultos mayores. En el relevamiento de 2019, 16% de los encuestados dijo que no asistía a un refugio por falta de cupos, mientras que ese motivo solo fue traído a colación por 8% de las personas relevadas en 2020.
El perfil de la población a la intemperie se mantiene "muy similar" al de anteriores censos, según el Mides. De las personas que accedieron a responder la encuesta, nueve de cada 10 son varones y tienen 39 años en promedio, 54% estuvo preso y un 30% declaró tener problemas de salud mental o haber estado internado en el pasado.
Se constató una "sobrerepresentación" de la población afrodescendiente, siendo 3 de cada 10 encuestados. En la medición de 2020 la pasta base figura como la droga más cosumida, por encima del alcohol.
El 48% de los encuestados dijo que está en situación de calle desde hace menos de un año y 12%, desde hace menos de un mes. En este relevamiento se incluyó una nueva categoría para medir el impacto de la emergencia sanitaria por covid-19, que reveló que 58% de las personas en situación de calle perdió fuentes de ingresos y 27% redujo su trabajo desde el 13 de marzo.
En cuanto a los vínculos, 65% de las personas duermen solas en la calle y más de la mitad (56%) está en contacto con personas que no están en su misma situación. En el último año aumentó el apoyo proveniente de vecinos de la zona (53% dijo haber recibido algún tipo de ayuda de este tipo), pero más de la mitad declara haber sufrido agresiones de algún tipo estando en la calle. Aproximadamente 66% tiene trabajos informales y precarios; la mitad de quienes están desempleados busca trabajo.
Bartol señaló que la persistencia de personas en situación de calle es un "problema endémico”, que en 2020 pegó "un salto considerable”. Sin embargo, destacó la respuesta del Mides que abrió nuevos cupos, muchos de ellos en centros que funcionan las 24 horas y no solo durante la noche.
El ministro dijo que "es necesario hacer mucho más" para abordar el problema en conjunto con otros organismos del Estado. "Dar más y mejores respuestas para, como dice el presidente, no dar a ningún uruguayo por perdido", resumió en la conferencia de prensa.
La coordinadora residente de Naciones Unidas en Uruguay, Mireia Villar, anunció que en las próximas tres semanas este organismo trabajará con el gobierno para definir “el marco de cooperación 2021-2025”.
Este período coincide con la elaboración del proyecto de ley de Presupuesto. Consultado por este tema, Bartol dijo que "está todo a discutir" y que no ha habido "una decisión sobre el número final" que va a presentar el Poder Ejecutivo.
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