G. PEREIRO: NO SOY UN JUGADOR DE GARRA, ES ALGO QUE TENGO QUE MEJORAR

Elegante, exquisito y sutil. Así se expresa sobre un terreno de juego Gastón Pereiro (Montevideo - 1995). El mediapunta del PSV también se comporta así en esta entrevista con MARCA en la que comparte sus deseos para el 2018. A sus 22 años sueña con jugar su primer Mundial y llevar a La Celeste a lo más alto.


"Es mi tercera temporada en Holanda, por ahora estoy muy contento", introduce Gastón.
Su imponente altura de 188 centímetros confunden porque parece un jugador torpe, pero todo lo contrario, el uruguayo posee una refinada técnica y es letal como demuestran sus 27 goles en Holanda sin ser un delantero centro. "No soy ese tipo de de jugador de garra, es una virtud que tengo que mejorar para crecer como jugador", subraya sobre una característica innata en el futbolista uruguayo.

"En la selección hay un grupo unido y fuerte, trataré de aprender de todos un poquito", añade un jugador que ha empezado a contar para Tabárez en las últimas convocatorias de La Celeste. Algo que merecía, viendo sus números con su club y su precocidad para abrirse paso en el fútbol europeo.

Por eso, Pereiro confía en mantenerse entre los elegidos para soñar con disputar su primer Mundial: "Me gusta como mediapunta y soy compatible con Luis Suárez y Cavani. Me encantaría jugar con ellos. Si tengo que jugar en banda o en el medio tampoco tengo problema".

En esa cita siempre hay que contar con Uruguay, "porque ninguna selección quiere jugar contra nosotros, sabe que les costará mucho ganarnos", en lo que respecta al objetivo en Rusia es ambicioso: "La expectativa es máxima y queremos llegar a lo más alto. Eso es lo que marcamos al principio, luego se irá viendo".

El Mundial sería el escaparate ideal para un futbolista que ya está en las agendas de muchos equipos de otras Ligas: "A mí siempre desde chico me gustó el fútbol italiano y español. Aunque no tengo que elegir una Liga, si me llega alguna propuesta ya se verá". El PSV tendrá difícil retener a un jugador preparado para grandes desafíos en Europa.