El cantante country Glen (Travis) Campbell (Billstown, Arkansas, 22/04/1936-Nashville, Tennessee 8/08/2017), a pesar de provenir de un género tan localista, se convirtió en una estrella mundial, gracias a una tendencia pop que quedó patente en uno de su más grandes éxitos, "Rhinestone Cowboy". Su muerte ayer a los 81 años, deja atrás, además, una carrera de más de 50 años en los que vendió más de 45 millones de discos, una fama que alcanzó al cine y la televisión y un problemático vínculo con el alcohol y las drogas que lo convirtieron, además, en una figura mediática. Campbell sufría del mal de Alzheimer, una enfermedad que confesó públicamente en 2011 y que, de acuerdo a su publicista, fue la causa de su muerte. Su padecimiento quedó reflejado en el documental Glen Campbell: Ill Be Me, dirigido por James Keach y que está disponible en el servicio de Netflix.
Cuando dio a conocer su enfermedad anunció, además, el comienzo de su última gira que de cinco conciertos pasó a 150 shows en 15 meses. En junio de este año, editó su último disco, Adiós, un título que ya revelaba lo inevitable.
Fue ganador de los premios Grammy en varias ocasiones, siendo el único en haber ganado dicho premio en dos categorías distintas (country y pop) de manera simultánea. Fue incluido en el Sálon de la Fama de la Música Country en el año 2005.
Campbell había nacido en Arkansas el 22 de abril de 1936 y a los seis años empezó su carrera musical en las radios locales. A los 20 años se mudó a Los Ángeles donde después de una larga carrera como acompañante de gente como Frank Sinatra y los Beach Boys, consiguió su primer éxito en 1967. Dos años después ya tenía su propio show televisivo The Glen Campbell Goodtime Hour.
Estrella cinematográfica, presentador de televisión y prolífico músico con más de 70 álbumes publicados en 50 años de carrera, este versátil cantante fue uno de los grandes artífices en orillar el género vaquero a aguas del pop, en una visión musical fabulosa, que aunaba lo mejor de ambos universos, creando un sonido que ha marcado a generaciones de artistas hasta nuestros días.
Glen nació en el seno de una familia extremadamente humilde, originaria de la pequeña comunidad de Billstown, su padre era agricultor, fue el séptimo hijo de un total de doce. Bajo la influencia de su tío comenzó a tocar la guitarra, de manera lírica, es decir sin tener conocimiento de la lectura de música. Campbell es zurdo de nacimiento, pero toca como diestro. Al cumplir los dieciocho años de edad viajó hacia el sur formando parte de "The Western Wranglers". En 1958 emigró a la ciudad de Los Angeles para convertirse en músico de sesión (estudio).
Fue muy solicitado como tal por distintos artistas de principios de los '60, colaborando con: Bobby Darin, Ricky Nelson, Merle Haggard, The Monkees, Elvis Presley, Frank Sinatra, Dean Martin, The Association, Jan and Dean y The Mamas & The Papas.
Fue también miembro de hecho y derecho de los Beach Boys, al cubrir la ausencia -por enfermedad- de Brian Wilson en la gira de 1964 a 1965, e incluso participó en la grabación de su disco Pet Sounds.
Desde entonces mantuvo su carrera a flote a pesar de sus adicciones, una característica de su personalidad que nunca ocultó. Su figura pública era más la de un cowboy amable y de sonrisa franca.
Entre sus mayores éxitos deberían figurar —además de "Rhinestone Cowboy"— canciones como "By the Time I Get To Phoenix", "Witchita Lineman", "Gentle on my mind", "Southern Nights". Era más un cantante que un compositor, algunos de sus principales éxitos son de Jimmy Webb y otros autores clásicos de la música americana.
Hace apenas unas semanas se publicó el disco Adiós, un recopilatorio donde se incluyen versiones suyas de temas de Bob Dylan, Fred Neil o Willie Nelson. Adiós es también el título de la última canción del álbum. Una balada tierna a corazón abierto sobre el valor de haber vivido una vida plenamente, con fracasos, éxitos y sueños, y “bebiendo margaritas de noche en una vieja cantina de California”. Una despedida al alcance solo de los más grandes.
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