Según contaron al diario El País fuentes que participaron del encuentro, Basso reclamó que el Centro Médico de Salto garantizara que la instalación del IMAE en el interior no iba a provocar que las demás instituciones de estas características (hay otras 6 privadas en Montevideo) pidieran que se actualizaran los aranceles, es decir el dinero que reciben por cada procedimiento.
Las autoridades de la mutualista contestaron al ministro que no tienen capacidad para pedir a los otros IMAE que no hagan reclamos de estas características. De esta manera, la autorización del nuevo IMAE al norte del país continúa trancada.
Basso, en tanto, dijo en rueda de prensa a la salida de la reunión, que “lo que se está conversando es que esto no implique dar más recursos al sector privado”, porque ya “no hay más dinero para estos emprendimientos”.
Ola de críticas.
El sí del gobierno al IMAE cardiológico en Salto generó una dura polémica y fuertes acusaciones hacia el Ministerio de Salud Pública.
La primera piedra la tiró en Twitter el presidente del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), Julio Trostchansky. "Inaudito se haya cedido a presiones de corporación empresarial del interior y se habilite nuevo IMAE privado. ¿Qué pasa con el Hospital de Tacuarembó?", escribió este sábado.
El exsubsecretario de Salud Pública, Leonel Briozzo, en tanto, expresó en la red social: "¡Muy bien IMAE (en) Salto! Ahora IMAE en Tacuarembó: cobertura a todo el norte y complementación públicoprivada".
El director del Hospital Maciel, otra institución pública que se considera de referencia, Álvaro Villar, dijo a El País que "el IMAE (en Tacuarembó) sale por una decisión política, o va a salir por la presión popular, porque ya se está hablando de movilizaciones y se están juntando voluntades de varios partidos políticos".
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