La Junta Departamental de Montevideo aprobó ayer el ajuste presupuestal 2017 que
incorpora un impuesto adicional para las viviendas deshabitadas, un fondo
para arreglar veredas y una rebaja en los impuestos para
espectáculos públicos nacionales. El gobernante Frente Amplio reacciona positivamente de esta manera, ante el hecho concreto que en Montevideo hay al menos 35.000 viviendas vacías y los precios de los alquileres llevan en muchos casos a que se deba destinar a ellos el 50 % de los ingresos familiares.
Así, desde el 1º de enero de 2017
comenzará a regir un impuesto adicional de 100% a las viviendas
deshabitadas. El decreto de ajuste presupuestal establece en su artículo
8 que el adicional gravará a "las fincas en la zona urbana y sub urbana
que se hallen deshabitadas en forma permanente durante al menos un
año".
Se considera como fincas deshabitadas a
"aquellas en que por el lapso de un año civil sus consumos de energía
eléctrica y /o agua sean inferiores en un 90% al promedio histórico de
consumo", para lo que se tomarán los datos de los cinco años civiles
anteriores.
Para el edil frentista Sebastián Valdez, esa duplicación del impuesto es un "mensaje
político importante" que da la administración, ya que se trata de
viviendas vacías en zonas con servicios que se recuperan.
Sin embargo,
la oposición lo rechaza por entender que "podría llegar a lesionar
derechos", dijo el edil blanco Julio Barrios.
En cuanto a los espectáculos públicos, el impuesto se baja de 9,09 %
a 1% de lo recaudado para la danza, coro, stand up y en forma
progresiva para la música.
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