El fallo del Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA) sobre el caso Cablevisión si bien no afecta en nada la situación jurídica con esa empresa propiedad del grupo argentino Clarín, implicó que todas las decisiones tomadas en el camino hacia la televisión digital queden sin efecto.
El gobierno de José Mujica (2010-2015) discutió durante más de 4 años los cambios en los medios: definió una fecha de apagado para la televisión analógica, le mantuvo las frecuencias a los canales 4, 10 y 12 sin pedir nada a cambio y asignó en una decisión muy polémica dos nuevos canales privados para emisión digital abierta en Montevideo: Giro y VTV.
Pero todo eso cayó por el fallo del TCA que le dio la razón a Cablevisión –que ofrece servicio de televisión para abonados en Montevideo y Canelones– y anuló un decreto del Poder Ejecutivo del 11 de mayo de 2012, que es el eje del esquema de reorganización del espectro radioeléctrico para habilitar la televisión digital.
Los efectos
Ahora, ante esa resolución del TCA, el gobierno del presidente Tabaré Vázquez tiene el desafío de armar un nuevo esquema jurídico. Pero este fallo también es una oportunidad para que el gobierno ajuste algunas cosas que no estaban saliendo bien.
Por ejemplo, el decreto que ahora cayó en función del fallo del TCA, establecía que el apagón analógico se debía realizar el próximo 21 de noviembre pero la realidad del mercado en función de planteos de empresas que entran en el negocio de la televisión digital muestra que no es la mejor idea y por eso el gobierno estudia extender ese plazo.
El apagón analógico es, ni más ni menos, que la fecha en que todas las señales de televisión abierta dejarán de emitirse analógicamente y pasarán a ser digitales. Cuando eso pase, toda persona que quiera recibir la señal deberá tener un televisor con sintonizador ISDBT incorporado o comprar un decodificador externo cuyo costo ronda los US$ 100. Los canales privados de Montevideo (4, 10 y 12) emiten desde hace varios meses sus señales digitales, y cualquier televisor con sintonizador las puede ver.
Al respecto, uno de los problemas planteados refiere al acceso a los nuevos receptores por parte de las familias de menores recursos. En enero, el entonces director de Telecomunicaciones, Sergio de Cola, anunció que ANTEL participaría del proceso ofreciéndole a sus clientes la posibilidad de brindarles decodificadores, de forma de asistirlos en el proceso de cambio de tecnología.
Por otra parte, el fallo también es una oportunidad para los privados. Tanto Giro (consorcio integrado por La Diaria y Giro) como VTV, los dos privados a los que se les asignó una frecuencia, estaban atrasados para empezar a emitir y habían pedido la última prórroga que habilitaba el marco normativo. Por tanto, debían empezar a emitir sí o sí en octubre. Al caer el decreto, en función del fallo del TCA, pueden negociar con el gobierno una nueva fecha.
También el Poder Ejecutivo podría decidir asignarle la frecuencia a otras empresas. Según pudo saber El Observador, si bien la decisión no está tomada, prevalece la intención de mantener las definiciones del gobierno de Mujica. Sobre todo porque hay un principio en el derecho que es el de la "buena fe". Por tanto, decidir no darle un canal a Giro o a VTV puede exponer al Estado a juiciosde esas empresas.
Mujica firmó compensación de US$ 7 millones para Cablevisión
El proceso de reorganización del espectro radioeléctrico para ubicar los nuevos canales digitales enfrenta hace tiempo a Cablevisión con el Poder Ejecutivo. La empresa alegó que la administración de José Mujica, a través de tres decretos, le causó un perjuicio, ya que al quitarle ondas hizo topear sus señales en 80. La compañía del grupo argentino Clarín recurrió los decretos (entre ellos el 153/2012, que reguló los procedimientos para conceder las autorizaciones de televisión digital) y en todos los casos el Tribunal de lo Contencioso Administrativo le dio la razón y en todos los casos por el mismo motivo: la ausencia de vista previa que afectó su derecho de defensa.
El 27 de febrero, dos días antes de dejar el gobierno, Mujica firmó un decreto por el que buscó solucionar la situación con Cablevisión. En esa disposición, el Poder Ejecutivo estableció una compensación de US$ 7 millones para esa empresa a la que, además, le asignó seis señales para emitir en digital
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