"Las llamas del odio se están extendiendo a través de Israel y amenazan con destruirlo", advirtió el presidente Reuvén Rivlin. "Un apuñalamiento en la Marcha del Orgullo Gay de Jerusalén y un ataque con cocteles Molotov contra una vivienda palestina, provocando la muerte a un niño palestino, deben servir como una muy necesaria "llamada de atención" para todo el país, expresó. A su vez el conocido rabino Benny Lau declaró: "Todo aquel que se sienta en la mesa de Shabat o en una sinagoga o en un estadio de fútbol y oye alguna vez chistes racistas y homofóbicos y no se levanta ni protesta, es cómplice del derramamiento de sangre" y añadió "un judío no debe matar no sólo a judíos, sino a nadie".
Rivlin formuló esas declaraciones en una manifestación en Jerusalén contra la violencia y la homofobia que condujeron a los dos ataques. El presidente denunció que "se ha creado una atmósfera que ha permitido indulgencia hacia lo que se llama ingenuamente como 'malas hierbas'".
"Toda sociedad tiene franjas extremistas, pero hoy tenemos que preguntarnos: ¿cuál es en el ambiente público que permite al extremismo y a los extremistas andar con confianza, a plena luz del día? ¿Qué es lo que ha permitido a estas malas hierbas amenazar la seguridad de todo el jardín de flores?", apuntó Rivlin.
"Los ciudadanos de Israel, del Israel judío y democrático, del Israel democrático y judío, precisa hoy una llamada de atención", instó.
El presidente advirtió que las llamas al odio, la violencia y las " creencias falsas, distorsionadas y retorcidas se están extendiendo a través de esta tierra", y que Israel ya no puede darse el lujo de seguir desestimando estos ataques.
"Estas llamas, que nos están consumiendo a todos, no pueden ser extinguidas con las condenas débiles [de los políticos]. Estas llamas no pueden ser extinguidas con marchas de solidaridad. Ni siquiera con esta marcha. Estas llamas no pueden ser extinguidas con mensajes en Facebook y declaraciones en los medios de comunicación. Estas llamas no pueden ser extinguidas con la represión, la negación y el desprecio. La incitación, el ridículo, la frivolidad, la laxitud y la arrogancia no pueden extinguir el fuego; sino solamente hacer que prenda más intensamente, con fervor, se extienda en todas las direcciones, e impregne todos los ámbitos de la vida ", señaló Rivlin.
"Tenemos que ser completamente claros; desde el sistema educativo, hasta aquellos que deben hacer cumplir la ley, a través de la dirigencia del pueblo y del
país. Hay que apagar las llamas, la incitación, antes de que nos destruyan", advirtió.
"No vamos a ser fanáticos. No vamos a ser matones. No nos convertiremos en una anarquía ", prosiguió.
El presidente describió sus emociones durante su visita al hospital donde están internados los sobrevivientes de la familia Dawabsha, cuya vivienda fue quemada intencionalmente por presuntos colonos judíos, diciendo que estaba "avergonzado [e] intimidado por el poder del odio".
"[Me siento] avergonzado de que un país que ha conocido el asesinato de Shalhevet Pass [asesinada en 2001 en Hebrón por un francotirador palestino], de la familia Fogel [asesinada en su casa de Itamar por dos terroristas palestinos en marzo 2011], de Adele Biton [el bebé que murió este año después de sufrir graves lesiones sufridas en un ataque con bomba incendiaria palestina en 2013], de Eyal, Gil-ad y Naftali [los tres adolescentes israelíes secuestrados y asesinados el pasado verano] y Muhammad Abu Khdeir [el adolescente palestino secuestrado y quemado vivo por extremistas judíos en un ataque de represalia por los tres adolescentes israelíes], todavía hay quienes no dudan en encender las llamas, para quemar la carne de un bebé, para aumentar el odio y el terror", dijo Rivlin.
El presidente recibió varias amenazas por internet después de haber expresado en su Facebook su vergüenza debido a que los asesinos [del niño] Dawabsha provinieron de "mi pueblo".
Algunos de los que respondieron a su mensaje dijeron que deseaban que el presidente sufra un destino similar al de Ariel Sharon e Yitzhak Rabin.
Durante la manifestación en Tel Aviv, organizada por Paz Ahora, el ex presidente Shimon Peres advirtió que "las fuerzas extremistas oscuras" amenazan con destruir al Estado de Israel, y pidió a todos los israelíes que las enfrenten y las rechacen.
Peres dijo que Israel tiene que luchar "una guerra de liberación - para liberar al Estado de Israel de la locura y de los locos".
En un discurso en la marcha de protesta en Tel Aviv contra el apuñalamiento múltiple contra integrantes de la comunidad LGBT, el reconocido rabino Benny Lau ha declarado: "Todo aquel que se sienta en la mesa de Shabat o en una sinagoga o en un estadio de fútbol y oye alguna vez chistes racistas y homofóbicos y no se levanta ni protesta, es cómplice del derramamiento de sangre. Tenemos que liberar a la Torá de las cadenas impuestas por gente de alma oscura".
Además, se opuso firmemente al tipo de indignación chauvinista que lamenta que un judío haya apuñalado a otros: "eso es puro racismo. Un judío apuñaló a otros seres humanos, y punto. No podemos tolerar esos comentarios, sobre todo entre quienes oran en las sinagogas, recitan el ´No matarás´ y luego van y queman una familia palestina en nombre de Dios".
"Todo debe comenzar desde nuestra casa, hablando con nuestros grupos de
jóvenes, hablando en las escuelas. Tenemos que asumir la responsabilidad. Nadie, nadie, debe vivir escondido en el armario. El armario es la muerte. La vida es la vida. Elijamos la vida. Tenemos que asegurarnos de que ningún niño o niña, hombre o mujer, tenga miedo de vivir de una manera abierta y llena de calidez. Esta es nuestra responsabilidad en nombre de la Torá, el nombre del Dios de Israel, para la gente que quiera vivir aquí en esta tierra", añadió Lau.
"Estamos en un entorno de alto riesgo. Cantemos ´amor por siempre´. Necesitamos crear olas de amor. Necesitamos liberar a la gente del miedo, mostrarnos abiertos y libres, que no haya dudas ni tartamudeos. Si nuestros oídos escuchan a alguien, no importa si es un rabino o maestro o guía, con un sonido fuera de tono, que puede lastimar, debemos detenerlo enseguida. El fuego se inicia allí. Se inicia con insultos menores, con el racismo en sus expresiones mínimas", declaró emocionado el rabino.
"Los que incitan contra los ciudadanos árabes de Israel no deberían sorprenderse cuando las mezquitas y las iglesias son incendiadas o incluso cuando un bebé es quemado vivo en la noche", enfatizó Peres.
En un discurso en la marcha de protesta en Tel Aviv contra el apuñalamiento múltiple contra integrantes de la comunidad LGBT, el reconocido rabino Benny Lau ha declarado: "Todo aquel que se sienta en la mesa de Shabat o en una sinagoga o en un estadio de fútbol y oye alguna vez chistes racistas y homofóbicos y no se levanta ni protesta, es cómplice del derramamiento de sangre. Tenemos que liberar a la Torá de las cadenas impuestas por gente de alma oscura".
Además, se opuso firmemente al tipo de indignación chauvinista que lamenta que un judío haya apuñalado a otros: "eso es puro racismo. Un judío apuñaló a otros seres humanos, y punto.
No podemos tolerar esos comentarios, sobre todo entre quienes oran en las sinagogas, recitan el ´No matarás´ y luego van y queman una familia palestina en nombre de Dios".
"Todo debe comenzar desde nuestra casa, hablando con nuestros grupos de jóvenes, hablando en las escuelas. Tenemos que asumir la responsabilidad. Nadie, nadie, debe vivir escondido en el armario. El armario es la muerte. La vida es la vida. Elijamos la vida. Tenemos que asegurarnos de que ningún niño o niña, hombre o mujer, tenga miedo de vivir de una manera abierta y llena de calidez. Esta es nuestra responsabilidad en nombre de la Torá, el nombre del Dios de Israel, para la gente que quiera vivir aquí en esta tierra", añadió Lau.
"Estamos en un entorno de alto riesgo. Cantemos ´amor por siempre´. Necesitamos crear olas de amor. Necesitamos liberar a la gente del miedo, mostrarnos abiertos y libres, que no haya dudas ni tartamudeos. Si nuestros oídos escuchan a alguien, no importa si es un rabino o maestro o guía, con un sonido fuera de tono, que puede lastimar, debemos detenerlo enseguida. El fuego se inicia allí. Se inicia con insultos menores, con el racismo en sus expresiones mínimas", declaró emocionado el rabino.
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