El problema es que las semillas germinaron y ahora las plantas ya forman parte del decorado de la ciudad.
Los medios alemanes hicieron eco de la noticia y algunos hablaron de forma irónica de una 'plaga de cáñamo', aunque las autoridades ya dieron la orden de arrancar las plantas de raíz.
El grupo 'Einige Autonome Blumenkinder' reivindicó a través de un comunicado haber plantado en junio varios kilos de semillas sin que nadie se enterara.
La acción fue en protesta contra la 'restrictiva' política antidrogas vigente que, a su juicio (y al de cualquier persona sensata), 'apesta'.
'No es comprensible que el cannabis no pueda ser comprado de forma legal igual que el alcohol', sostiene el grupo, que explicó que la mayoría de las semillas esparcidas contienen solo una pequeña cantidad de THC, uno de los psicoactivos presentes en la marihuana.
La siembra de semillas de marihuana podría ser considerada delito conforme a la legislación vigente sobre estupefacientes en Alemania.
Después, según explicó en una entrevista con el diario Süddeutsche Zeitung el director de planificación de la ciudad de Gotinga, Gerrit Lebensiek, las plantas se convertirán en compost, ya que la mayoría son macho y no contienen sustancias que tengan efectos estimulantes si se ingieren.
La acción ha contado con el apoyo de las Juventudes Verdes de Gotinga, que aseguraron haber llevado a cabo una iniciativa similar, aunque más reducida, el año pasado.
Como muestra de su apoyo, esta asociación ha convocado un concurso de fotografía en el que animan a la gente a fotografiar la 'belleza' de estas plantas y a compartir sus instantáneas en la web.
La Policía está estudiando estas fotografías con el fin de reconocer los lugares en los que han crecido, como en los jardines de la comisaría.
La acción de 'Einige Autonome Blumenkinder' ha puesto de nuevo sobre la mesa el debate de la legalización del consumo de marihuana, prohibido en Alemania.
Fuente: Subrayado
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