-- --

Buscar información

Facebook y Twitter

jueves, 6 de junio de 2013

LA OPINION DE RUBEN H. DIAZ: LA HISTORIA EN URUGUAY, UN ENFRENTAMIENTO INVENTADO

La presencia de los hechos históricos en la contienda política diaria, en el Uruguay, es un acontecimiento que algún día habrá que estudiar. A nadie se le ocurre, por ejemplo, en Gran Bretaña que el partido conservador convoque al electorado durante el período proselitista a través de una foto de Winston Churchill. O en Francia el socialismo con Jean Jaures. O Estados Unidos de América los demócratas con John Kennedy o los republicanos con Ronald Reagan. Podríamos presentar infinitos ejemplos en el mundo.


Todos los casos citados son de líderes, cronológicamente hablando, posteriores a J. Batlle, A. Saravia, F. Rivera u M. Oribe. La mención a ellos y otros es tan recurrente como inexplicable.

Lo que se logra con eso es seguirlos situando en el centro de la controversia pública, en vez lograr que constituyan un patrimonio de todos. Y se les menciona en sus antecedentes para tomar decisiones de presente, aun en casos que puede también invocarse actitudes de ese mismo líder en sentido contrario. Lo que es usual en quienes tuvieron una dilatada actuación pública.

Pero esas invocaciones son casi siempre para recordar los enfrentamientos que los dos partidos tradicionales tuvieron a lo largo de la historia. Y la verdad es que los hechos fueron exactamente al revés. Mucho mas fueron los encuentros y entendimientos.
Uruguay es y principalmente en los momentos de mayor éxito, una construcción compartida.

Los enfrentamientos  resultan esporádicos y en todo caso felizmente con muy pocas excepciones de desprecio a la vida. La clemencia, desde los momentos fundacionales de Artigas se invoco como patrimonio de todos los orientales.

Uruguay ha sido siempre un país de coincidencias, de encuentros.

El Frente Amplio, la fuerza política que hoy ha logrado una hegemonía electoral que nunca en la historia cada uno de los partidos tradicionales individualmente pudieron lograr, tuvo uno de sus pilares, interpretando a su manera y conveniencia la historia, entender el hecho de que esta fue una construcción conjunta de la sociedad.

Parece muy claro que las colectividades tradicionales, que gobernaron luego de la dictadura durante 20 años prácticamente a través de una coalición porque nunca se consiguió un entendimiento electoral, han sido incapaces de formular un entendimiento electoral que además de necesario, si se aspira a gobernar, resulta lógico.
Hoy el mundo ha cambiado. Y el país también. Evolucionar no representa  renunciar al pasado.

José Batlle y Ordóñez fue un gran reformador, que duda cabe, de acuerdo a su época y su tiempo. Hoy, quienes lo invocan, de alguna forma están queriendo cristalizar un pasado que tiene mas de cien años. Otro tanto puede decirse dentro del Partido Nacional.

Si todo se mantiene así, la próxima contienda electoral será de muy baja calidad. Por un lado el Frente, en un papel hegemónico. Por otro dos partidos, separados y sin ninguna posibilidad cierta, aunque por el balotage pudieran vencer a la coalición, de ejercer separados el gobierno.

¿No es mas lógico un acuerdo de sinceramiento, que en el proceso electoral dirima por voto popular una formula común y una propuesta realista y atractiva que seduzca, convoque y entusiasme?.

No hay comentarios: