"El sistema de salud estuvo convulsionado el año pasado, cuando suceden estas cosas pasa lo que sucedió. El sistema de donación y trasplante es un sistema de alerta y se prendieron todas las luces", explicó al diario Ultimas Noticias, la directora del Instituto Nacional de Donación y Trasplante de Células Tejidos y Órganos (Indt), Prof. Dra. Inés Álvarez, al explicar la reducción de estas intervenciones durante 2010
"Tuvimos menor cantidad de denuncias de muertes encefálicas e independientemente de eso, internamente también estuvimos convulsionados como todo el sistema. La efectividad con la cual trabajamos en todos los órdenes fue menor", afirmó la jerarca.
"Creo que las dos cosas, lamentablemente se conjuraron para bajar la cantidad de pacientes que tenían que haber sido trasplantados y no se pudo", indicó con resignación. "Esto realmente nos conmocionó a todos cuando hicimos el análisis, el equipo quedó shockeado", agregó.
Sin embargo, las cifras de enero fueron mejores y, según Álvarez, el "engranaje" está funcionando nuevamente luego que el sistema se "tranquilizo".
La jerarca explicó que uno de los cánones para evaluar el funcionamiento de un sistema de salud es el de trasplantes. Este está integrado por múltiples factores, personas y atraviesa todo el sistema. "Pero si en esa cadena uno de los eslabones termina saltando, uno solo basta para entorpecer todo", afirmó.
Álvarez recordó que en 2010 se atravesó un "tiempo muy duro en todos los ámbitos de la salud. Uno se lo esperaba pero queríamos ver los números finales. Esperamos remontarlo pronto y poder actuar con mayor celeridad, como se debe hacer".
Para las autoridades del instituto la voluntad y la confianza, son fundamentales en el trasplante. "Si el sistema hace agua por un lado, hay una huelga por otro y tu paciente se encuentra en el medio de todo, podés llegar a pensar: ¿y lo habrán tratado bien? Es la pregunta más lógica", indicó Álvarez.
Para la jerarca hubo varios desajustes como por ejemplo faltas de aviso a tiempo, cuando algunos "efectores de salud" no avisaron que tenían un paciente con muerte encefálica a tiempo (en las primeras horas).
"Si tengo un paciente que hace 48 horas tiene diagnosticada una muerte encefálica la destrucción de órganos es total", afirmó. Los donantes tienen que reunir tres condiciones fundamentales para ser efectivos, primero deben haber fallecido, segundo tener la aprobación de la persona o la familia de ser donante y tercero la condición médica para serlo.
La tasa de donantes multiorgánicos, cuyos órganos sirvieron para más de un paciente en lista de espera, fue la que sufrió el impacto más profundo por los cambios en el sistema de salud. Descendió de una tasa de 19 a 15,5 por millón de población.
En el caso de los "donantes reales de tejidos" la tasa por millón de habitantes en 2010 fue de 18,18, cifra que debería ser superior según las autoridades del Indt.
En este marco el año pasado se realizaron siete trasplantes de corazón, dos de pulmón, 12 de hígado, 88 de riñón y cuatro de páncreas y riñón al mismo tiempo.
Por otra parte la lista de espera de pacientes uruguayos hasta el 14 de febrero, se compone de 14 personas que esperan trasplante hepático, uno para pulmón, 16 cardíacos, 413 para trasplante renal y 447 para córneas (el único tejido que tiene lista de espera).
Como destaque la directora del Instituto indicó que la voluntad del donante no ha variado, según una última consulta a la población el 85.09% dijo que quería ser donante y el 14.91% indicó que no quería serlo.
Proyectan centros de alta complejidad
El Instituto Nacional de Donación y Trasplante (Indt) planifica la instalación de tres unidades biotecnológicas de alta complejidad: el Banco Nacional de Sangre de Cordón umbilical, el Consorcio de Bioingeniería Celular y Tisular y la Unidad de Terapia Celular.
Los tres centros funcionarán en el quinto piso del Hospital de Clínicas. El Consorcio de Bioingeniería trabajará en forma coordinada con el Instituto y varias instituciones como la Universidad de la República y el Clemente Estable entre otros. Mientras el de Terapia Celular funcionará con la Facultad de Medicina.
Por otra parte se profundizó el convenio existente con Argentina que en un principio funcionaba bien hasta que una resolución del Mercosur en 2009 indicó que los países debían tratar de ser autosuficientes. "Que los receptores fueran trasplantados con los donantes de su país", aclaró a Ultimas Noticias la directora del Indt, Inés Álvarez.
"Esto fue rápidamente internalizado por Argentina, y colocó a Uruguay en una situación crítica, porque había algunos programas de trasplante que no estaban siendo efectivos en nuestro país", explicó. Por ejemplo, en Uruguay se realiza el trasplante hepático de adultos y se cuenta con donantes, pero en el caso de los niños todavía no es efectivo. En este marco se arregló con Argentina un sistema especial. La opción uno indica que el trasplante se hace en ese país pero el donante y el receptor son uruguayos.
La opción dos precisa que si existe una emergencia porque de repente se manifiesta una hepatitis fulminante aguda y en 48 horas el paciente se muere, en este caso se mete al paciente en la lista de espera de los argentinos y Uruguay le devuelve después a Argentina un órgano a cambio.
Otro caso es cuando nuestro país tiene un órgano que no es compatible con un uruguayo, se va a Argentina y esta en algún momento lo devuelve.
Mientras tanto con Chile la intención es ir armando un sistema parecido al que se tiene con Argentina. En este marco las autoridades uruguayas estuvieron en diciembre pasado en el país trasandino para "profundizar" y "hacerlo ejecutivo".
Este tipo de convenios no es fácil de hacer debido a las diferentes culturas y formas de ver las cosas. Además las tasas de donación tampoco son iguales entre los países de la región.
Fundado en 1978
El Banco Nacional de Órganos y Tejidos abrió sus puertas el 17 de noviembre de 1978, como parte de un proyecto conjunto del Poder Ejecutivo y la Universidad de la República, señala el sitio web del organismo.
La dirección del B.N.O.T. y la Comisión Asesora ha llevado a cabo la tarea encomendada durante 25 años, agrega.
Su primer director fue el profesor emérito Rodríguez Barrios desde sus comienzos a 1982
Entre ese año y 1999 la dirección fue ejercida por la profesora Betty Bono Alvarez. A comienzos de los años 2000, el centro cambió su nombre por el Instituto Nacional de Donación y Trasplante.
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