El calor emitido por las computadoras portátiles (laptops) puede producir quemaduras y decoloraciones de la piel si se está expuesto a éste varias horas diarias. El síndrome se lo conoce como “piel tostada”, y ya se han presentado varios casos a nivel mundial.
El fenómeno consiste en la deformación de la piel, cuya elasticidad se comprime y aumenta una porosidad similar a la de una esponja. Tal es el caso de un niño de 12 años, cuyo muslo izquierdo sufrió el síndrome tras jugar largo rato con su laptop en la falda.
"El percibía que la computadora se ponía caliente del costado izquierdo, pero a pesar de eso no cambió de postura", señalaron investigadores a la revista Pediatrics.
El dermatólogo Néstor Macedo explicó a Espectador.com que el fenómeno “es similar al de la bolsa de agua caliente”. Durante el invierno varios uruguayos colocan el saco entre sus piernas, muchas horas y días consecutivos. “Eso produce problemas a nivel vascular”, agregó.
El riesgo de padecer este síndrome se acrecienta con la expansión de la industria informática y el aumento en la utilización de computadoras portátiles. Actualmente, una laptop alcanza 52º en su parte inferior, y en contacto con la piel a largo plazo puede ser nocivo.
Expertos dijeron a la agencia EFE que se recomienda el uso de fundas protectoras. Este elemento podría disminuir el riesgo de contraer un cáncer de piel, aunque hasta el momento no se hayan registrado casos de esa naturaleza.
Una almohadilla portátil de refrigeración regula el calor emitido por una computadora portátil y evita que se sobrecaliente. Previene daños graves a los componentes internos y ayuda a preservar la vida de la batería.
Se compone de una serie de ventiladores para disipar el calor, y las rejillas de ventilación para dirigir el calor hacia el exterior. Por lo general, es bajo el portátil y se conecta a través del puerto USB
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