Los muertos nos rodean, así ha sido siempre, según la creencia de muchos, en especial quienes son religiosos. Entre ellos estarían los zombies,quienes están presentes en el arte, la literatura, el entretenimiento e incluso la educación. Pero todos nos planteamos la misma pregunta... ¿ son reales o pura ficción ? un invento de la mente ? o hay algo más ?
Los muertos vivientes también parecen estar de moda en el mundo de la academia: La Universidad de Baltimore abrió una nueva clase sobre los seres sobrenaturales.
Arnold Blumberg, autor del libro "Zombiemania" sobre películas de zombies y curador del Museo de Entretenimiento Geppi, que se especializa en la cultura pop estadounidense, será el profesor del curso, informó el periódico The Baltimore Sun.
Pero... ¿Qué es un zombie? Naturalmente la respuesta dependerá de quien conteste la pregunta. Para los productores de Hollywood los zombies son figuras, que se levantan de sus tumbas y caminan hacia usted tiesos con los brazos extendidos, apestando a carne podrida.
Pero en Haití, los zombies podrían ser desafortunadas víctimas. Gente que ha sido forzada a la esclavitud bajo la influencia de las drogas muy potentes.
"No es lo que vemos en Hollywood, por supuesto. Un zombi es un cadáver reanimado que ha sido devuelto a la vida para servir como esclavo de un sacerdote vudú o una sacerdotisa", dijo a la prensa Brad Steiger, uno de los autores más prolíficos de libros que tratan de fenómenos inexplicables.
En su reciente libro, "Real Zombies, the Living Dead and Creatures of the Apocalypse" (Visible Ink Press), Steiger explora las historias de zombies en el mundo real.
"Tengo la historia de un hombre de Miami que fue a Haití y estaba bailando con una dama haitiana muy hermosa, y sintió un pinchazo en el brazo, no supo lo que estaba pasando. Cuando se despertó, se encontraba todavía con su traje y corbata, pero estaba sucio con tierra", explica Steiger.
"Sin embargo, este hombre recobró el conocimiento y logró regresar a Miami. Pero este tipo de cosas sigue siendo practicada por sacerdotes y sacerdotisas sin escrúpulos. En general, estamos hablando de una religión que es seguida por 80 millones de personas en todo el mundo", recalcó.
Si un hombre ha estado cerca a la cultura de los zombies es antropólogo Wade Davis. En 1982, Davis se infiltró en las sociedades secretas del vudú haitiano, lo que resultó en en año 1985, en uno de los libros más vendidos de todos los tiempos (y posterior película) "La serpiente y el arco iris".
Davis investigó el caso más famoso documentado de un zombie del mundo real, Clairvius Narcisse, quien en 1962, fue declarado muerto en un hospital de Haití y sepultado más tarde.
Después de 18 años, Narcisse apareció vivo y contó su historia: fue drogado, enterrado, removido de una tumba y sometido a la esclavitud en una plantación con otros hombres que supuestamente compartieron el mismo destino.
"Tenemos el caso de Narcisse. De todas las pruebas científicas, que probaban que estaba muerto, y él volvió a entrar en el reino de los vivos", dijo Davis a AOL News. "Precisamente porque los científicos implicados no creían en la magia, ellos tenían que tener una explicación científica".
Davis explica que el caso de Narcisse trajo a la atención de los investigadores "una serie de informes que se encuentran en toda la literatura popular y académica de la existencia de un veneno que aseguran crea un estado de muerte aparente tan profunda que podría engañar a un médico. "
Una droga llamada tetrodotoxina.
"La tetrodotoxina resulta ser una molécula muy grande que bloquea los canales de sodio en los nervios, provoca una parálisis periférica, baja los índices metabólicos y, sin embargo la conciencia se mantiene hasta el momento de la muerte", dijo Davis.
Después de un sacerdote, del vudú, ha puesto a la tetrodotoxina en el cuerpo de alguien, y esa persona es declarada muerta y enterrada posteriormente, se desentierra el cuerpo y se le aplica una pasta química para mantener a la desafortunada víctima en un estado de zombie, de trance.
Esta persona es utilizada como un esclavo.
Davis sugiere que tiene sentido que algunos sacerdotes sin escrúpulos en Haití se aprovechen de tal veneno.
De acuerdo o no con estas historias, la realidad es que seguiremos hablando de ellas, las culturas desconocidas y oscuras seguirán siendo motivo de grandes debates y grandes obras de la literatura y el cine.
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