Este miércoles murió un militar que hizo honor a su uniforme, prefiriendo ir preso a las mazmorras de la dictadura, antes que apoyar el golpe civil militar del año 1973. Óscar Lebel Schott (Nueva Helvecia, 10-05-1925 - Montevideo, 3-02- 2016) fue un marino mercante, políglota, escritor, profesor y contralmirante uruguayo. Tenía 90 años.
Lebel fue el oficial de la Armada afín al líder frenteamplista Líber Seregni, que cuando el golpe de Estado del 27 de junio de 1973, siendo capitán de navío, colocó en su casa -ubicada en La Gazeta 1206 casi 26 de Marzo- un gran cartel (“¡Abajo la dictadura!”) y esperó, uniformado y armado, a que lo detuvieran.
Permaneció en prisión hasta 1977, cuando fue expulsado de la fuerza y se integró a la marina mercante.
Por una ley del año 2001 fue ascendido al grado de contralmirante retirado.
Lebel nació en Nueva Helvecia, hijo de Paula y Oscar Lebel, su padre fue comerciante y soldado en la Primera Guerra Mundial (1914-1918), y su hogar de religión evangélica. Realizó sus estudios secundarios y los culminó en Montevideo en 1940, ingresando al Liceo Militar y después a la Escuela Naval.
En 1946, egresó como guardiamarina, iniciando su carrera como oficial de la Armada. Dominio de cinco idiomas (español, inglés, alemán, portugués, francés). Comandó el buque petrolero “Presidente Oribe” en 1962, destructor General Artigas (ROU 04).
Ejerció como profesor en la Escuela Naval y la Escuela de Guerra Naval y en dos períodos presidió el Club Naval (1968-1972), ubicado en el barrio Carrasco de Montevideo.3
La mañana del 27 de junio de 1973, salió uniformado al balcón de su casa en Montevideo, colocó la bandera uruguaya y la artiguista, y un cartel que decía:
En el libro La trama oculta del poder, de Jorge Chagas y Gustavo Trullem Seregni revela que el único contacto mantenido con la dirigencia del MLN (tupamaros) fue durante el invierno de 1971 en su domicilio de Bulevar Artigas y bulevar España. En esa ocasión se discutió el problema de la doble militancia –la que se daba particularmente a través del Movimiento 26 de Marzo– y la necesidad de que el embajador inglés (Geoffrey Jackson) fuera liberado. Mientras se desarrolló la conversación, el capitán de navío Óscar Lebel y Domingo Carlevaro esperaron en una habitación contigua con las armas cargadas. (De la Enciclopedia de El País)
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