El futbolista portugués Ricardo Ferreira, que juega en el Portugal Futebol Clube, fue sancionado por 50 años sin jugar al fútbol, por haberle pegado con la pelota a un árbitro, tirarle agua e insultarlo, en un partido de la 4ta. división de Suiza. Una muy buena medida.
El jugador, de 28 años de edad, según publica el diario suizo 'Blick', se encontraba en el banco de suplentes durante el partido que su equipo perdió contra el SC Worb, por 1-0. No obstante al finalizar el encuentro, Ferreira le pegó con todas sus fuerzas al balón que termina conectando la cara al árbitro, quien lo expulsa mientras sale adolorido del terreno de juego, durante ese trayecto el jugador le tiró agua encima y lo insultó en varias oportunidades.
Robert Breiter, abogado de la Federación Suiza de Fútbol, indicó en diálogo con el diario: "Fue un asalto con vehemencia contra el colegiado, Ferreira tiene la pelota y se le ve la intención de golpearlo".
El jugador había declarado, en diálogo con el mismo medio, que "el balonazo fue sin querer" y que siente "lo del agua y los insultos", pero no pudo evitar la sanción, por ser reincidente.
Ese fue el último partido para el portugués, ya que la Asociación de Fútbol de Suiza decretó que será sancionado hasta el 5 de junio del 2064.
Lo cierto es que se trata de un "bloqueo por tiempo indefinido", pero que el sistema de la federación determina que debe haber una fecha final de sanción, por lo que se propuso esa fecha.
"Soy conocido entre los árbitros y en la Federación, es cierto. Me podría esperar una sanción de un año o dos. ¿Pero cincuenta? El fútbol es mi vida", explicó el jugador, que podrá seguir entrenándose con sus compañeros, pero que, de cumplir el castigo, no volverá a jugar un partido de fútbol oficial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario