La embajadora de Estados Unidos de América ante las Naciones Unidas, Samantha Power, denunció que la violencia contra las mujeres es una "vergüenza internacional que afecta al 35 % de las mujeres". El 83 % de las adolescentes yanquis de entre 12 y 16 años que van a colegios públicos han sido acosadas sexualmente, aseguró la embajadora.
En un comunicado con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, Power denunció que la violencia contra las mujeres es una "vergüenza internacional que afecta al 35 % de las mujeres en algún momento de su vida".
"La violencia contra las mujeres no es cultural, es criminal. La igualdad no viene sola, es algo por lo que tenemos que luchar", añadió la embajadora de Estados Unidos ante la ONU.
Estados Unidos de Améerica empezó hoy sus "16 Días de Activismo contra la Violencia de Género", una iniciativa internacional que incluye diferentes mesas redondas y conferencias para concienciar a la población de que la violencia de género es contraria a los derechos humanos y que finalizará el próximo 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos.
Asimismo, el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, también tiene previsto sumarse a la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer asistiendo al anuncio de la construcción de un nuevo refugio para las víctimas de la violencia doméstica en Chicago.
En 2010, alrededor de 270.000 mujeres o niñas estadounidenses a partir de los 12 años sufrieron acosos sexuales o violaciones, de acuerdo con los últimos datos del Departamento de Justicia, divulgados en marzo, que supuso una caída del 64 % respecto al registro de 1995, cuando hubo 556.000 víctimas de violencia sexual.
La tasa de delitos sexuales contra las mujeres alcanzó su punto más alto en 1995, con 5 delitos por cada 1.000 mujeres, descendió hasta 1,8 por cada 1.000 mujeres en 2005 y se mantuvo estable hasta 2010.
El Congreso de Estados Unidos aprobó en 1994 la ley sobre la Violencia contra las Mujeres (conocida en inglés como VAWA), que protege a víctimas de la violencia doméstica y sexual y cuya actualización se aprobó en febrero.
Además, la Cámara de Representantes reintrodujo la semana pasada por cuarta vez una propuesta de ley Internacional de Violencia contra las Mujeres, que pretende convertir la lucha contra la violencia de género en una prioridad de la política exterior estadounidense.
En este sentido, el Departamento de Estado lanzó en 2012 una estrategia a largo plazo para ayudar a prevenir y responder a la violencia de género en todo el mundo.
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