Ecuador pidió a un tribunal de arbitraje de La Haya que adopte medidas para detener lo que considera una 'campaña de desprestigio' de Chevron con la que la petrolera estaría buscando desconocer un millonario fallo judicial en su contra, por contaminación ambiental.
El procurador general Diego García dijo a la agencia pública Andes este viernes que envió una solicitud escrita a la corte, con el fin de que imponga medidas provisionales de protección a favor del país.
'Ecuador advierte al tribunal que debe impedir que Chevron continúe con esa estrategia', afirmó García y enfatizó que la empresa yanqui pretende 'afectar o distorsionar la imagen país' y 'cambiar la realidad del proceso arbitral o del proceso judicial'.
Chevron, que fue condenada en 2011 a pagar 19.000 millones de dólares por la contaminación generada por su filial Texaco durante los casi 30 años que operó en la Amazonía ecuatoriana, interpuso una demanda de arbitraje ante una corte de La Haya en 2009.
La multinacional busca que Ecuador asuma la millonaria indemnización, con el argumento de que la petrolera estatal ecuatoriana fue la responsable de los daños por un mal trabajo de recuperación ambiental.
Chevron alega, además, que el juicio en el que fue hallada culpable estuvo plagado de irregularidades y acusa al gobierno de Rafael Correa de intervenir indebidamente en el proceso.
El gigante petrolero fue condenado tras un largo litigio con comunidades indígenas y colonos, que acusan a Texaco de haber contaminado severamente la Amazonía, afectando el medio ambiente y la salud de los pobladores.
El fallo aún debe ser ratificado por el máximo tribunal ecuatoriano.
Texaco, que fue adquirida por Chevron en 2001, extrajo crudo de la Amazonía ecuatoriana entre 1964 y 1990, tras lo cual realizó un trabajo de recuperación ambiental duramente cuestionado por los demandantes.
El miércoles, la multinacional aseguró que la corte arbitral en La Haya la eximió de responsabilidad en el caso al reconocer un acuerdo de reparación ambiental que suscribió con las autoridades ecuatorianas de la época, lo que fue negado tajantemente por el procurador García.
En medio del tortuoso pleito, el presidente Correa lanzó el martes una ofensiva mediática contra la petrolera en respuesta a lo que considera una agresiòn directa.
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