URUGUAY: YA HAY UN SISMOGRAFO INSTALADO

Científicos uruguayos terminaron hace 20 días la puesta a punto del sismógrafo en las sierras de Aiguá, departamento de Maldonado, disponiéndose posteriormente las conexiones con la red de Brasil y el Centro Sismológico Internacional, todo lo que permitirá un relevamiento en tiempo real del comportamiento del subsuelo en el territorio nacional.


La directora del Instituto de Ciencias Geológicas, Dra. Leda Sánchez y el sismólogo Oscar Castro Artola, lideraron el equipo que culminó esta fase de tareas, que logró instalar el sismógrafo que fue enviado desde la Universidad de San Pablo. En una instancia futura se espera colocar tres sismógrafos propios que se sumarán a la red internacional.

El instrumental se suma al primer magnetómetro en suelo uruguayo, que se instaló a fines de 2012, y permite determinar los campos magnéticos y la actividad de dicho origen en nuestro suelo. Se espera que para mayo próximo se realice la presentación oficial de la Estación conectándola vía Internet en el marco de la Semana de la Ciencia y la Tecnología.

Un reclamo de la más larga data

La comunidad científica viene reclamando tener un sismógrafo instalado desde tiempos casi históricos, en tanto hasta ahora era imposible detectar la actividad sísmica y cuales son las principales zonas de riesgo en Uruguay.

Si bien el territorio nacional está asentado sobre una base de muy baja actividad, el país no es ajeno a los terremotos.

El mayor que se recuerda tuvo lugar el 5 de junio de 1888, con una magnitud de 5,5 en la escala Richter, con epicentro a 15 quilómetros al suroeste de Colonia del Sacramento.

Produjo daños leves en edificios tanto en Montevideo como en Buenos Aires,  pero era una época que las construcciones difícilmente superaban los dos pisos lo que minimizó los daños.

Sin embargo la zona puede verse afectada por las repercusiones de movimientos en placas tectónicas del Pacífico, según entienden los investigadores.