Luego de una travesía y el lógico cansancio que siempre genera viajar a Japón, el "Millonario" mostró absoluta superioridad sobre un débil adversario asiático, que llegó a esta instancia por haberse consagrado en la Copa de Japón (como si fuera la Copa Argentina acá). La diferencia de jerarquía quedó en manifiesto, sobre todo, en los primeros 45 minutos, donde el dueño de América tomó el control del partido, manejó el balón y apabulló, por momentos, a su rival.
Ya en el complemento, y con el 2-0 a su favor, River decidió replegarse un poco, como consecuencia, también, del cansancio. Igualmente, más allá de esto, el Gamba Osaka jamás logró poner en aprietos al "Millonario"; aunque sí estuvo más cerca del arco de Barovero, quien tuvo un correcto encuentro, ya que contó con algunas intervenciones importantes.
El golazo del "Pity" fue la 'frutilla del postre', dentro de un partido sin equivalencias.
Fue goleada en tierras asiáticas. Y así, otro logro de Gallardo, un entrenador que sigue posicionando a River en lo más alto y que ahora tendrá por delante la ilusión de chocar con el Barcelona, en la final del Mundial de Clubes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario