Será porque ya son conscientes que no ganarán la presidencia, tal vez sea por la necesidad de crear y agitar nuevos fantasmas -repitiendo una vez más las estrategias del miedo- o simplemente confundir sobre la realidad y hacer olvidar el pasado, lo cierto es que se ha desatado una suerte de “batalla” sobre las mayorías parlamentarias.
Parados desde la falacia que sólo el Frente Amplio ha gobernado con mayorías parlamentarias, parecen decididos a realizar una campaña para impedir que las obtengamos nuevamente. Razonemos, ¿no han existido siempre las mayorías parlamentarias?, claro que siempre han existido, la diferencia radica si esas mayorías son de derecha o de izquierda. Y no es un tema menor, porque bien diferentes han sido los resultados de una y de otra.
Recordemos los altos costos que pagó el país y los uruguayos todos por las mayorías de derecha. Los “acuerdos” por los que blancos y colorados sumaban sus votos en el parlamento significaban la creación de un sinfín de cargos, recordemos que hasta implicaron la creación de un Ministerio para cumplir con la cuota comprometida… el de Deportes, ¿lo recuerdan?
Pero además, esos acuerdos incluían una cantidad de compromisos que no sólo no se cumplían, sino que muchas veces se hacía todo lo contrario. Basta hacer memoria y recordar cuando se comprometieron a no crear más impuestos… y se crearon varios más que incluyeron hasta adicionales al más injusto de ellos, el IVA.
Las mayorías de derecha nos llevaron, sin ir más lejos, a la peor crisis de la historia del Uruguay, con más de la mitad de los niños viviendo por debajo de la línea de la pobreza -de 0 a 5 años alcanzó el 57,6%- en un país donde el 39.6% de sus ciudadanos eran pobres. La postergación del salario, el desempleo, la postergación presupuestal de la policía, de la salud y de la educación, por citar sólo algunos ejemplos. Estos fueron el costo de las mayorías parlamentarias de derecha.
El Frente Amplio ha usado, legítimamente, sus mayorías en un sentido diametralmente opuesto. Nos han permitido cumplir con nuestro programa de gobierno, el programa votado por la amplia mayoría de la población. Las mayorías que nos han permitido votar casi medio centenar de leyes laborales que benefician a todos los trabajadores y trabajadoras del Uruguay, principalmente aquellos históricamente postergados por las otras mayorías.
Mayorías que nos permitieron atender la emergencia social, erradicar la indigencia y abatir la pobreza; mejorar el presupuesto educativo, los recursos de la salud, de la seguridad, entre otros. Realizar reformas profundas con mayor justicia tributaria, y una política económica sólida, estable, de garantías, que ha permitido el histórico crecimiento del país.
Pongamos las cosas en su lugar, es de esto que hablamos cuando hablamos de mayorías parlamentarias. El Frente Amplio tiene un proyecto, que estamos convencidos es el mejor proyecto para el Uruguay, y los resultados así lo demuestran.
Para continuar con ese proyecto, para profundizarlo, para seguir avanzado, y para conquistar los nuevos sueños de los que hablábamos en nuestra columna pasada, necesitamos que el Frente Amplio triunfe nuevamente y con mayorías propias. Hacia allí vamos y los invitamos a que una vez más nos acompañen.
Dra. Mónica Xavier
Presidenta del Frente Amplio
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