En el primer trimestre de 2011 la economía uruguaya continuó creciendo. Con relación al período inmediato anterior, el Producto Bruto Interno (PBI) aumentó 2,3% y en la comparación interanual el crecimiento fue de 6,8%.
El Banco Central divulgó las Cuentas Nacionales correspondientes al primer trimestre de 2011, en las que se proyectó -entre otros datos- la evolución del Producto Bruto Interno (PBI).
De acuerdo al documento, este indicador nacional creció 2,3% comparando los primeros tres meses del año con relación al período inmediato anterior, medido en términos desestacionalizados.
Y comparado el primer trimestre de este año con el mismo período pero de 2010, el crecimiento registrado fue de 6,8%.
En términos de volumen, la demanda interna creció con respecto al mismo trimestre del año anterior, debido al aumento de 8,3% registrado en los renglones Gasto de Consumo Final y de 13,3% en Formación Bruta de Capital.
No obstante, esta mejora fue compensada por el saldo negativo de la balanza comercial, ya que el crecimiento de 23,3% de las Importaciones superó al incremento de 14,7% de las Exportaciones y generó un efecto neto negativo del volumen físico de los bienes y servicios comerciados con el exterior.
Entre los elementos que el informe del BCU destacó como determinante del crecimiento del Producto estuvo el incremento de la actividad turística registrado este año, debido al incremento en el número de turistas ingresados como en el nivel de gasto de estos.
En la mayoría de los sectores, el volumen físico del valor agregado mostró un incremento con respecto al año anterior.
El informe destacó que se produjeron aumentos en los renglones Comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles, Transporte, almacenamiento y comunicaciones, en Actividades primarias e Industrias manufactureras.
En términos interanuales, el crecimiento de 6,8% registrado en el primer trimestre de 2011 derivó de los aumentos de 5,6% registrado en el volumen físico del Valor Agregado Bruto (VAB), a precios básicos, y de 13,8% en los impuestos netos de subvenciones sobre los productos.
A excepción de los servicios de Suministro de electricidad, gas y agua, la mayoría de los sectores contribuyeron positivamente a la generación de valor agregado.
Los capítulos que más incidieron en el comportamiento global fueron las actividades de Comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles, a cuenta del aumento en las ventas de automóviles y otros productos importados, y las de Transporte, almacenamiento y comunicaciones, debido al comportamiento expansivo de las telecomunicaciones.
El valor agregado de la actividad Agropecuaria presentó un crecimiento de 4,1% con relación al mismo período del año pasado, a consecuencia de los incrementos de la producción Pecuaria y la Agrícola.
En la actividad Pecuaria, la producción de la ganadería vacuna se expandió debido a una mayor ganancia en el peso promedio del stock y a las mayores exportaciones de ganado en pie, que compensaron los menores niveles de faena.
Esto fue acompañado por un incremento en la producción lechera, consecutiva a un mayor stock de vacas en ordeñe y los buenos rendimientos del rubro.
Por su parte, el crecimiento en la actividad Agrícola ocurrió a expensas de una mayor producción de arroz, en virtud de incrementos en el área sembrada y en los rendimientos medios por hectárea.
Pero el resultado fue parcialmente contrarrestado por caídas en los cultivos de maíz y soja, a consecuencia del menor rendimiento motivado por el déficit hídrico de los primeros meses del año.
En Industrias manufactureras, el valor agregado aumentó 3,9% en términos interanuales.
Este resultado fue consecuencia de una mayor producción de la industria química, básicamente a expensas de los productos de refinería, farmacéuticos, caucho y plástico, material de transporte y productos de pasta de celulosa, papel, imprentas y madera, y productos alimenticios como lácteos, pescado y raciones para animales.
Destacaron por su bajo nivel de actividad industrias alimenticias como la frigorífica y elaboración de jarabes y concentrados.
El valor agregado del capítulo Suministro de electricidad, gas y agua presentó una caída interanual de 51,4%, fundamentalmente a consecuencia de la actividad de Generación y distribución de energía eléctrica.
En el primer trimestre de este año, en parte debió recurrirse a la generación eléctrica con centrales térmicas, mientras que en el primer trimestre del año pasado la producción fue realizada básicamente de forma hidráulica, cuya producción genera mayor valor agregado por unidad de producción.
El sector Construcción experimentó un aumento de 7,2% de su valor agregado, con relación al primer trimestre del año anterior, más allá del diferente comportamiento de los sectores público y privado.
En este trimestre la construcción privada mantuvo la tendencia positiva registrada en trimestres anteriores, mientras que la construcción pública registró una caída a consecuencia de la disminución en las obras realizadas por el Ministerio de Transporte.
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