Alta, rubia, 26 años, oriunda del pueblo Gegrorio Aznarez (Maldonado), Evangelina Ortiz venía de casi una década de residencia en Buenos Aires y se lanzó de lleno a la pantalla de Canal 4. Pero los tiempos han cambiado:
Cuatro meses después y cuando Gran hermano está llegando a su fin, Eva reconsideró el rumbo de su futuro y resolvió volver a Argentina, donde la espera el recomienzo de sus estudios de maestría, algunos proyectos laborales y su novio, un joven de origen porteño.
“Me da nostalgia, pero estoy contenta con la decisión que tomé”, adelanta Ortiz desde el otro lado del charco. Pese a que tuvo varias ofertas para quedarse en la TV uruguaya, ninguna logró retenerla.
“No descarto para nada volver a trabajar en mi país. Fue un experiencia increíble, pero por ahora me decisión es estar en Buenos Aires, por un tema de estudios y por mi novio, que es importante también. Bueno, tal vez para la gente no lo es, pero para mí es importante estar con él. Capaz que si recibo una oferta de un programa semanal, que me permita viajar a Montevideo y volver a Buenos Aires, seguramente aceptaría”.
En aquella orilla, Ortiz tiene algunas chances de sumarse a programas de señales de TV cable. Además, recibió la llamada de la revista Playboy que quiere hacer una producción de fotos con ella. Hot, por supuesto.
“Lo estoy analizando, tal vez lo haga, en mi círculo tengo gente en contra y gente a favor. Mi novio está en contra... veremos”, dice Ortiz.
—¿Qué balance hacés de estos meses en Gran Hermano y en Uruguay?
—Muy positivo, fue la primera vez que trabajé en un canal de aire, en vivo y en Uruguay. Había estado en el noticiero, en Telenoche mismo, pero lo de GH es otra cosa. Otra faceta. Descubrí que puedo tener un lado humorístico. La gente vio en mí que soy divertida, que se reía. En los comienzos, la idea era informar un poco sobre Gran Hermano, desde un lugar más serio.
Pero cuando vimos que daba para el humor, tomamos ese camino. Luis (Alberto Carballo) me hacía chistes y yo tenía dos caminos: enojarme y no contestarle, lo que no queda bueno o reírme de mí de misma. Todo bien. Es lo mejor que podés hacer, reírte de vos mismo. Mientras uno tenga claro lo que es lo que quiere y mientras el producto sirva.
—Gran Hermano se termina, ¿tuviste ofertas para quedarte en otro rol?
—Sí, tuve varias ofertas, algunas cosas que me gustaban y me cerraban pero tengo otras prioridades. Quiero terminar mis estudios por más que soy licenciada y locutora, pero quiero seguir capicatándose.
Y tengo a mi novio acá, que es importante. Capaz que para las personas no es importante, pero para mí sí. Es más: para los demás no importa nada, si no tuviera novio, sería mejor (risas). Pero fue una decisión que estoy segura de haber tomado. Es lo que siento.
—¿Cómo fue la convivencia con Luis?
—Luis es una persona muy divertida que siempre cuenta chistes, muy alegre... con todos los años que tiene de TV,me ayudó a sacarme los miedos, a no ser tan estructurada. El hecho de haber hecho noticiero me estructuró un poco. Pero con él, que es tan canchero, me ayudó un montón....
Luis como que sacó una faceta humorística mía. Más allá de que podíamos tener discusiones, claro, como en cualquier grupo de trabajo. Él pensaba una cosa y yo otra muchas veces.
—¿Qué te llevás de esta experiencia en Uruguay?
—Muchas cosas. La gente, su apoyo. Cuando empezamos con Gran Hermano tenía 200 amigos en Facebook y ahora tengo 2.000.Todos me dicen cosas lindas, por lo menos los que se acercan.
“Eva te extrañamos”, “Eva volvé”... Ese feedback está muy bueno. Es como todo, hay gente que no le gusta, que le parezco una tonta, una rubia tarada y gente que no. Hay de todo en la viña del Señor. Por lo menos la gente que se acerca me tira buena onda.
—¿Qué vas hacer en cuanto a lo laboral en Buenos Aires?
—Ahora tengo un par de producciones de fotos para hacer. Me llamaron de la revista Playboy, pero todavía no es seguro que lo haga.Vamos a ver, tengo que analizarlo. Tengo en mi círculos algunos a favor y otros en contra. Mi novio está en contra... veremos.
—¿Y en Uruguay?
—No descarto para nada volver a trabajar a Uruguay. Si hubiese algún programa que pueda hacer en la semana, que pueda viajar desde Buenos Aires, estoy dispuesto a hacerlo. Me gusta trabajar en mi país.
Muchas uruguayas lo hacen: Claudia Fernández, por ejemplo, que viaja todas las semanas. Una oferta de ese tipo no me ha llegado, pero seguramente aceptaría. En Buenos Aires tengo cosas interesantes en canales de cable, siempre con la conducción.
—Estamos en la víspera de la última gala de Gran He rmano , ¿quién gana para ti?
—Me sorprendió muchísimo que se haya ido Solange, que era candidata para mí. Está todo muy raro, no sabría si decir Christian U. Me parecía raro, aunque te digo que la sociedad argentina idolatra a personas que por ahí no hacen las cosas muy bien. Tenemos a Maradona, por ejemplo, que como futbolista ha sido excelente pero no así en las cosas de su vida.
Se le permite todo. No me extrañaría por ese lado porque estamos hablando de una sociedad media desvirtuada y no sería raro que gane Christian U. Un tipo que le gusta el juego, que es agresivo, se va de boca....Tengo la esperanza que la gente no le haga ganar, no me parece bueno como ejemplo.
Creo que Martín Anchorena es un buen candidato y en segundo lugar Emiliano... pero te repito: está todo muy raro.
—Ahora que la viste por dentro, ¿qué te parece la TV uruguaya?
—Me gusta.Creo que está tomando un cierto color y se está apostando a la producción nacional. Canal 4 apostó mucho, invirtió mucho en una programación excelente, también así los canales 10 y 12.
Está bueno eso. Hay muchísimo talento en Uruguay y muchas veces, quien no puede mostrarlo en su país, cruza el charco. Ojalá que eso empiece a cambiar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario