-- --

Buscar información

Facebook y Twitter

domingo, 19 de septiembre de 2010

IRAN: EL REGIMEN PERSIGUE FEROZMENTE A LOS OPOSITORES

Policías de paisano del gobierno absolutista de Irán, irrumpieron en la oficina de Mir Hosein Musaví días pasados y se incautaron de varias computadoras y objetos personales del líder del Movimiento Verde, denunció su página www.kalame.com.


La medida, que la web califica de "una nueva oleada de presiones y limitaciones", se produce apenas dos semanas después de que un grupo de incontrolados atacara el domicilio de Mehdi Karrubí, el otro dirigente reformista que cuestiona la reelección del presidente Mahmud Ahmadineyad el año pasado.

El resultado de aquellos comicios sacó a millones de iraníes a la calle, desatando unas protestas sin precedentes desde la revolución islámica de 1979.

Varias decenas de personas resultaron muertas en la represión y al menos dos centenares de los cuatro mil detenidos reconocidos por el Gobierno se encuentran en prisión pendientes de juicio o tras haber sido condenados en procesos que los defensores de derechos humanos consideran sin garantías.

Contra todo pronóstico, tanto Musaví como Karrubí han seguido manteniendo sus acusaciones de fraude.

Sin embargo, las autoridades, que defienden la limpieza del voto, han estrechado el cerco contra sus seguidores y logrado aislarlos con medidas que se asemejan a un arresto domiciliario encubierto.

En la penúltima vuelta de tuerca, las fuerzas de seguridad han estado impidiendo el acceso al despacho de Musaví durante varios días y horas antes de asaltarlo detuvieron a su responsable.

"La pasada noche, las fuerzas de seguridad entraron en la oficina de Mir Hosein Musaví, registraron el lugar y se incautaron de diverso material (...) incluidos ordenadores", asegura www.Kalame.com respecto al ataque del jueves.

La web también deja constancia de sus temores a que se produzcan "acciones más violentas" contra el antiguo primer ministro.

El gobierno parece haber renunciado a su detención por el momento, para evitar que ese paso galvanice a sus partidarios y se han limitado al acoso continuado.

A mediados de agosto, los directores de los medios de comunicación iraníes recibieron una circular que les prohibía no solo informar de las actividades de los tres principales dirigentes reformistas (los ya mencionados Musaví y Karrubí, más el ex presidente Mohamed Jatamí), sino incluso mencionar sus nombres.

Todas las publicaciones reformistas y la mayoría de las webs de la oposición han sido cerradas durante el año pasado, reduciendo aún más el ya de por sí estrecho margen de debate que toleraba la República Islámica.

Musaví mantiene que el movimiento reformista sigue vivo, pero sus actividades se reducen a periódicos comunicados y debates en internet, cuyo acceso está cada vez más controlado.

La mayoría de los iraníes que salieron a la calle el año pasado se confiesan desencantados con el resultado.

Muchos consideran que el líder verde no ha querido enfrentarse al régimen del que procede hasta el punto de ponerlo en peligro.

No hay comentarios: