Néstor "Tito" Gonçalvez Martinicorena (Cabellos,27-04-1936-Montevideo,29-12-2016), el "capitán de capitanes" del conocido club de fútbol uruguayo Peñarol y una de las mayores glorias de dicha institución, falleció este jueves a los 80 años, informaron a la prensa fuentes del club. Gonçalves estaba internado hace dos semanas por un problema renal, que se fue agravando con los días. En ese lapso recibió la visita de decenas de personas del fútbol, sobre todo vinculadas a Peñarol.
Había nacido en 1936 en Cabellos, un pueblo de Artigas que ahora se
llama Baltasar Brum, donde su familia tenía campo. A los 15 años se fue a
jugar al Universitario de Salto. Dejó su casa y esa soledad comenzó a
forjar una personalidad a prueba de cualquier desafío. Alto, fuerte pero
de buena técnica, de gran personalidad y voz de mando, se destacó
pronto en el fútbol del interior e interesó a Peñarol. Como la
reglamentación no le permitía practicar por otro club, se probó bajo el
nombre ficticio de Carlos Silva. Fue en el Parque Saroldi, donde se
encontró con héroes de Maracaná como Oscar Míguez, Víctor Rodríguez
Andrade y William Martínez, ajeno al hecho de que pronto recibiría como
herencia la camiseta número cinco de Obdulio Varela.
Sin llegar a debutar con los aurinegros, fue convocado a la Selección que disputó el Sudamericano de Lima de 1957. Con la Celeste jugaría dos mundiales (Chile 1962 e Inglaterra 1966) y también sus últimos minutos en una cancha: cuatro minutos frente a Alemania Oriental en el Centenario, en febrero de 1971, como módico y breve homenaje.
Su gran historia la hizo con Peñarol. La estadística marca que defendió al club en 571 partidos. Ganó nueve Campeonatos Uruguayos (cinco de ellos seguidos), tres copas Libertadores, dos Intercontinentales y una Supercopa. Tantos títulos lo convierten en símbolo de una era triunfal, en la cual sus colores supieron tanto de batallas épicas como de giras por el mundo. Alguna vez se habló de su pase al exterior. River argentino, Real Madrid, fueron posibilidades. Por decisión propia se quedó. Y como símbolo de un fútbol que ya no existe, cumplió toda su carrera con la aurinegra. Hasta que una noche, frente a Cerro, por el Campeonato Uruguayo de 1970, solicitó el cambio antes de que terminara el primer tiempo, saludó a las tribunas y se despidió sin más formalidad que las lágrimas en los ojos.
El "Tito" es uno de los jugadores más ganadores de la historia del club, incluidas 3 Copa Libertadores, 2 intercontinentales, 9 títulos uruguayos y una Super Copa, en 574 partidos con el club. A lo largo de toda su carrera solo vistió los colores de Peñarol.
Con Peñarol ganó los títulos de la Libertadores en 1960, 1961 y 1966, además de las intercontinentales de 1961 y 1966. Fue también parte del primer quinquenio del club (1958-1962), cinco de sus nueve títulos con el club en sus 14 años de carrera.
Su hijo, Jorge Goncalvez, también fue parte de la historia grande del club, ya que fue parte del último título de Libertadores auriengro, en 1987.
El "Tito" fue innumerables veces homenajeado por Peñarol, y participó de presentación de entrenadores y jugadores. También fue el encargado de inaugurar, junto al presidente Juan Pedro Damiani, el estadio Campeón del Siglo en abril de este año.
En 1980, Goncalves habla de esta manera sobre la consagración en 1960:
En aquel momento nadie imaginaba lo que significaba un título de campeón de América. Ni siquiera nosotros, que lo habíamos conquistado. Fíjese que el primero en darse cuenta fue Maidana, en el hotel, después que jugamos contra Olimpia en Asunción. Compartíamos una habitación él, Panchito Majewski y yo, y de pronto me dijo: '¿Te das cuenta que somos los mejores de América?.
Ese partido en Asunción fue durísimo. Hubo que aguantar muchas cosas. A Maidana le tiraban escobas de atrás del arco, entre otras muchas cosas. En esa época era un poco el vale todo.
Pienso que entonces, esa primera vez que se jugó la Copa, Peñarol era el único que realmente estaba concientizado para ganarla. Y por eso fue que la ganamos a pesar de esa tremenda final en Asunción.
El de Peñarol en ese momento no era un gran equipo, comenzaba a armarse. Era el embrión de lo que posteriormente llegó a ser Peñarol en la década de 1960. Pero tenía gente de una entrega tremenda a la que con ningún tipo de amenazas la asustaban y era en todos lados.
El velorio será en el Estadio Campeón del Siglo a desde la hora 17 hasta las 23 mientras que el entierro tendrá lugar el viernes a la mañana únicamente para familiares y amigos cercanos.
Sin llegar a debutar con los aurinegros, fue convocado a la Selección que disputó el Sudamericano de Lima de 1957. Con la Celeste jugaría dos mundiales (Chile 1962 e Inglaterra 1966) y también sus últimos minutos en una cancha: cuatro minutos frente a Alemania Oriental en el Centenario, en febrero de 1971, como módico y breve homenaje.
Su gran historia la hizo con Peñarol. La estadística marca que defendió al club en 571 partidos. Ganó nueve Campeonatos Uruguayos (cinco de ellos seguidos), tres copas Libertadores, dos Intercontinentales y una Supercopa. Tantos títulos lo convierten en símbolo de una era triunfal, en la cual sus colores supieron tanto de batallas épicas como de giras por el mundo. Alguna vez se habló de su pase al exterior. River argentino, Real Madrid, fueron posibilidades. Por decisión propia se quedó. Y como símbolo de un fútbol que ya no existe, cumplió toda su carrera con la aurinegra. Hasta que una noche, frente a Cerro, por el Campeonato Uruguayo de 1970, solicitó el cambio antes de que terminara el primer tiempo, saludó a las tribunas y se despidió sin más formalidad que las lágrimas en los ojos.
El "Tito" es uno de los jugadores más ganadores de la historia del club, incluidas 3 Copa Libertadores, 2 intercontinentales, 9 títulos uruguayos y una Super Copa, en 574 partidos con el club. A lo largo de toda su carrera solo vistió los colores de Peñarol.
Con Peñarol ganó los títulos de la Libertadores en 1960, 1961 y 1966, además de las intercontinentales de 1961 y 1966. Fue también parte del primer quinquenio del club (1958-1962), cinco de sus nueve títulos con el club en sus 14 años de carrera.
Su hijo, Jorge Goncalvez, también fue parte de la historia grande del club, ya que fue parte del último título de Libertadores auriengro, en 1987.
El "Tito" fue innumerables veces homenajeado por Peñarol, y participó de presentación de entrenadores y jugadores. También fue el encargado de inaugurar, junto al presidente Juan Pedro Damiani, el estadio Campeón del Siglo en abril de este año.
En 1980, Goncalves habla de esta manera sobre la consagración en 1960:
En aquel momento nadie imaginaba lo que significaba un título de campeón de América. Ni siquiera nosotros, que lo habíamos conquistado. Fíjese que el primero en darse cuenta fue Maidana, en el hotel, después que jugamos contra Olimpia en Asunción. Compartíamos una habitación él, Panchito Majewski y yo, y de pronto me dijo: '¿Te das cuenta que somos los mejores de América?.
Ese partido en Asunción fue durísimo. Hubo que aguantar muchas cosas. A Maidana le tiraban escobas de atrás del arco, entre otras muchas cosas. En esa época era un poco el vale todo.
Pienso que entonces, esa primera vez que se jugó la Copa, Peñarol era el único que realmente estaba concientizado para ganarla. Y por eso fue que la ganamos a pesar de esa tremenda final en Asunción.
El de Peñarol en ese momento no era un gran equipo, comenzaba a armarse. Era el embrión de lo que posteriormente llegó a ser Peñarol en la década de 1960. Pero tenía gente de una entrega tremenda a la que con ningún tipo de amenazas la asustaban y era en todos lados.
El velorio será en el Estadio Campeón del Siglo a desde la hora 17 hasta las 23 mientras que el entierro tendrá lugar el viernes a la mañana únicamente para familiares y amigos cercanos.
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