Uruguay venía del golpe duro que había significado la eliminación del Mundial de Alemania 2006, a manos de Australia por penales. A partir de ese momento, es que el proyecto de Tabárez en todas y cada una de las selecciones uruguayas daría sus primeros pasos.
Con él comenzaría un repunte significativo tanto deportivo como institucional e incluso en lo anímico hacia los jugadores y hacia el público. Este último, que muchas veces estuvo bastante distanciado de la selección, se comenzó a acercar con triunfos y trofeos que La Celeste comenzó a obtener.
Pero estas consagraciones que la selección obtuvo en estos diez años no solo quedaron allí, sino que se vieron reflejadas en la idea que el mundo comenzó a tener de Uruguay. Esto —acompañado de figuras como Diego Lugano, Luis Suárez, Diego Forlán, Edinson Cavani o Diego Godín— tuvo sus réditos dentro del campo e hicieron que Uruguay trepe en un Ranking FIFA que no le había sido favorable hasta entonces.
Si se lleva a cabo un promedio general desde que se creó el Ranking FIFA, Uruguay se ubicaría en el puesto 23, pero si el promedio se analiza en estos últimos diez años aumenta considerablemente, ya que la selección uruguaya se ubicaría en el lugar 14. Por más que con el promedio no se alcance el top ten, demuestra el avance que ha logrado la selección en este último proceso.
En estos diez años, la peor posición de Uruguay en el ranking fue en enero de 2007 y febrero de 2008, donde se ubicó en el lugar 30 por debajo de selecciones como Israel, Egipto, Noruega, Bulgaria o Ghana, todas ellas varios escalones por detrás de Uruguay hoy en día.
Por el contrario, la mejor figuración de Uruguay en el ranking FIFA se dio en junio de 2012, cuando La Celeste se ubicó en el segundo lugar por detrás de España, que era la campeona del mundo.
El posicionamiento de Uruguay en este ranking ha tenido altibajos en estos diez años, pero también en esta década se alcanzó un lugar récord y que solamente se podrá superar el día que Uruguay alcance el primer lugar de la tabla.
Esta clasificación que se lleva a cabo pura y exclusivamente en relación a los resultados deportivos, no hace más que demostrar todo lo que la selección logró en estos diez años. Desde el cuarto lugar del Mundial de Sudáfrica, la obtención de la Copa América en el 2011 y el regreso de Uruguay a los Juegos Olímpicos en la disciplina del fútbol luego de 84 años; además de los reconocimientos individuales de varios jugadores que han pasado y que aún están en esta selección, que por si fuera poco, está realizando una excelente campaña rumbo a Rusia 2018.
En el cierre de este 2016 la selección uruguaya no ha bajado su ritmo y se mantiene dentro del top 10 del mundo (puesto 9), según el ranking de diciembre que se dio a conocer el pasado jueves.
De los diez años que lleva el proceso, tan solo en tres de ellos Uruguay se quedó afuera del top 20 y fue en los tres primeros. A partir de allí fueron dos top 20, un top 15 y cinco top 10, lo que demuestra el verdadero avance que consiguió La Celeste.
Un avance que le permitió ser cabeza de serie en el Mundial de Brasil 2014, por estar dentro de los ocho mejores en ese momento, y que le otorgó su regreso a la elite mundial además de una clara posibilidad de conseguir una histórica clasificación directa a Rusia.
10 años del "maestro" al mando.
La segunda era de Oscar Wahington Tabárez en la selección uruguaya representa 139 partidos de los cuales 69 fueron ganados, 36 terminaron en empate y 34 resultaron en derrota. Este proceso que ya lleva 10 años al frente de la selección será difícil de olvidar por las consagraciones que obtuvo, por los jugadores que han formado el plantel y por un entrenador que volvió a poner a La Celeste en lo más alto del fútbol mundial.
A su vez, Tabárez se convirtió en histórico, luego de que en el encuentro frente a Chile, por las Eliminatorias rumbo a Rusia 2018, se convirtiera en el entrenador con más partidos dirigidos de una selección. Con 167 partidos (sumando sus dos pasajes como entrenador de la Celeste) superó al alemán Sepp Herberger.
El proceso alcanzó los 10 años y las alegrías fueron muchas, pero la actualidad es positiva y eso es lo que más ilusiona tanto a los hinchas como a los jugadores, que ya tienen el camino allanado rumbo a Rusia 2018.
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