Juan Carlos Marizcurrena, responsable del secuestro de Valentina Simon en diciembre de 2003, podrá volver a ejercer como abogado y escribano. La Suprema Corte de Justicia lo rehabilitó para el ejercicio de la profesión, informó el semanario Búsqueda.
Abogado, escribano y productor rural, Marizcurrena recuperó la libertad en 2008. Estuvo cinco años preso en el penal de Santiago Vázquez por secuestrar a Simon, quien entonces tenía 16 años.
La joven fue retenida durante 21 días en una casa de Punta Carretas, propiedad de Marizcurrena.
En 2004, la Corte había suspendido como abogado al entonces recluso.
El caso tuvo amplia cobertura y gran impacto en la sociedad. Marizcurrena era un hombre sin antecedentes policiales de ningún tipo. Padre de familia, trabajaba en un importante estudio de abogados. Según sus amigos, en aquellas tres semanas pareció ser uno de los tantos montevideanos sorprendidos por la noticia.
Sin embargo, se comprobó que durante meses planificó el secuestro de Simon, hija de un jerarca bancario y nieta del expropietario de una reconocida financiera dedicada a emitir tarjetas de crédito.
Precisamente a este último, Marizcurrena conoció trabajando como escribano en el Shopping Tres Cruces, al que el empresario estaba vinculado.
El conocimiento de los negocios del abuelo de Valentina Simon fue lo que dio pie a la planificación del secuestro, según la versión policial.
Marizcurrena compró una camioneta para llevar a cabo el secuestro y durante siete u ocho meses investigó la vida cotidiana de la joven, a quien aparentemente no conocía en forma personal.
Uno de los aspectos más curiosos del caso es que el secuestrador pedía dinero del rescate a través de avisos de San Expedito que se publicaban en el diario El País.
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