El gobierno que se instalará en marzo es consciente de la “muy marcada” incertidumbre que existe a nivel económico, tanto en la región como en el resto del mundo, y pasará en esta materia “de la impaciencia táctica a la cautela estratégica”, anunció a Búsqueda el presidente electo, Dr. Tabaré Vázquez.
“Estamos viviendo en una situación de incertidumbre regional e internacional muy marcada. No sé para dónde va a encaminarse todo eso”, declaró el futuro mandatario.
Vázquez, que el 1º de marzo se cruzará por segunda vez la banda presidencial sobre el pecho —la primera fue el 1º de marzo de 2005—, aseguró que su administración aplicará una política de “austeridad republicana” y que encarará el futuro económico con “mucha cautela”.
También se refirió al planteo del senador blanco Jorge Larrañaga, quien reclamó cambiar la propuesta recibida por la oposición el lunes 19 para participar en el gobierno en 24 entidades estatales, aunque no en los Directorios del Banco de Previsión Social (BPS), del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), y de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE).
Durante una reunión con legisladores e intendentes blancos celebrada el martes 20 en el Palacio Legislativo, Larrañaga pidió replantear las condiciones de la negociación con el futuro gobierno.
Pero Vázquez cerró cualquier posibilidad en ese sentido. “En estos cinco años va este modelo” y “no hay posibilidad de cambios”, precisó a Búsqueda. “Cuando te digo una cosa, te digo una cosa”, agregó.
Vázquez consideró que “es una pena que después de estas reuniones, que fueron muy positivas, alguien salga a bombardearlas”.
El presidente electo adelantó además que probablemente la semana próxima anunciará su “voluntad política” para “generar espacios” en la dirección de “avanzar” en el conocimiento de lo que pasó con las personas “desaparecidas” durante la dictadura militar (1973-1985).
“Hay algunos reclamos de la sociedad civil y de organizaciones que ameritarían darle un nuevo empuje y un nuevo encare al trabajo”, indicó.
—Usted ha pedido cuidar los gastos de viajes, de publicidad, de cargos de confianza y el presidente Mujica ha justificado los últimos ajustes de las tarifas públicas en la necesidad de tener “prevención fiscal”. ¿Esto va en la línea de que habrá que “ajustarse el cinturón” durante el gobierno que usted presidirá desde el 1º de marzo?
—Va en la línea de lo que dije el mismo día que gané las elecciones internas en el Frente Amplio y hablé de las primeras 10 acciones que adoptaría un gobierno futuro frenteamplista. Allí manifesté que todo eso se haría en el marco de un gobierno que trabajará con toda transparencia y con una gran austeridad republicana. Bueno, ese es el marco: transparencia y austeridad republicana. Porque precisamos mucho ese dinero, que yo creo que no se utiliza adecuadamente, para acciones que son mucho más prioritarias.
—Ahora, un gobierno democrático siempre tiene que ser transparente y siempre es aconsejable que se maneje con austeridad republicana. ¿No incide acá, además, la situación regional? Es decir, lo que está pasando en Argentina, en Brasil y en Venezuela, por ejemplo.
—Sí, claro. Tenemos que mirar con mucha cautela el futuro económico. Con mucha cautela. Durante el próximo gobierno vamos a pasar de la impaciencia táctica a la cautela estratégica en esta materia. Esto lo dije de distintas maneras en el correr de la campaña electoral. Esa es la línea. Lo anunciamos. Y el que avisa no traiciona.
—¿Le preocupa el panorama económico en la región o además la situación a escala global, en cuanto al impacto que puedan tener sobre la economía uruguaya?
—Me preocupa todo lo que pueda impactar sobre nosotros. Estamos viviendo en una situación de incertidumbre regional e internacional muy marcada. No sé para dónde va a encaminarse todo eso. Aparentemente, Estados Unidos parece estar despegando. Pero si eso se confirma, puede ser, a la vez, una buena noticia y una mala noticia para Uruguay. Porque en ese caso el dólar se va a fortalecer y las tasas de interés pueden subir. Y si las tasas de interés suben, las inversiones se pueden ir para allá otra vez. Por eso es que hay que mirar con mucha prudencia esta situación. Fíjese de quiénes estamos hablando: de Brasil, de Argentina, de Venezuela, de Estados Unidos, de Rusia, de la Unión Europea y de China. Son los principales compradores que tiene Uruguay. Todo el mundo sabe que la Unión Europea está enfrentando fuertes restricciones y China... bueno, China hace su partido.
“Todos lo entendieron”
—El senador Jorge Larrañaga reclamó que usted cambie la propuesta que hizo a los partidos de la oposición el lunes 19, sobre cómo será la participación de esos sectores en el próximo gobierno. ¿Eso es posible?
—No. En la reunión que tuve con los cuatro partidos políticos, luego de hacer el planteo sobre el tema de la participación en los distintos organismos del Estado y después de haberles entregado en mano una lista con los cargos a disposición de la oposición en 24 instituciones, surgió de casi todos mis interlocutores la interrogante de decir: “¿Y ahora cómo seguimos con este tema?”. Les respondí, de acuerdo con los planteos que me habían hecho, que seguiríamos de dos maneras. En primer lugar, este modelo que estoy planteando es distinto de los modelos que se utilizaron en los gobiernos posteriores a la dictadura; desde no dar nada, a dar uno o dar más cargos. Los anteriores modelos tenían cosas positivas y cosas negativas. Este modelo seguramente también las tiene. Para mí tiene muchas cosas positivas, aunque puede tener aspectos negativos como los que algunos de ellos comentaron públicamente. Pero es un modelo. Apliquémoslo y veamos qué es lo positivo y qué es lo negativo. En segundo lugar, durante estos cinco años conversemos —y que conversen los partidos políticos— con la finalidad de ver si para el futuro se puede lograr un modelo que conforme a todos y evite las controversias. Pero que se aplique después de estos cinco años.
—¿No hay ninguna posibilidad, entonces, de que usted acceda al nuevo reclamo del senador Larrañaga?
—En estos cinco años va este modelo. Yo esto lo dije, creo, con la más absoluta claridad a los representantes de los partidos de la oposición. Todos lo entendieron.
—¿Y quién va a ser el interlocutor del gobierno con la oposición?
—El interlocutor, por razones obvias, va a ser Raúl Sendic. Él va a estar en el Parlamento y va a hablar con todos los partidos políticos. Esto quedó absolutamente claro. Insisto: este modelo se aplica en estos cinco años. Y no hay posibilidad de cambios. Cuando te digo una cosa, te digo una cosa.
—Está claro, pero ¿qué opina sobre el planteo de Larrañaga?
—Que lo que dijo corre por cuenta de él. O lo informaron mal o lo informaron bien y él quiere torcer una posición que no se va a torcer. Además, pensé mucho sobre este tema, lo medité muy bien, obviamente me puedo equivocar y sobre la marcha veremos, discutiremos y analizaremos. Por eso, reitero, quizá mirando hacia el futuro deberíamos ponernos de acuerdo y decir que, de aquí en adelante, para los próximos períodos de gobierno, la distribución será de esta forma, de esta otra o no la habrá. Pero ahora va a ser así. Si el senador Larrañaga quiere conversar sobre este tema, tendrá que conversar con Raúl Sendic. Pusimos reglas de juego que fueron bien claras. Y durante las cuatro reuniones nadie dijo nada, más que lamentarse muy levemente de no poder estar ni en el BPS, ni en el Codicen, ni en ASSE. Así que es una pena que después de estas reuniones, que fueron muy positivas, alguien salga a bombardearlas.
—Ha habido distintas formas de encarar este tema después de la dictadura. Durante el primer gobierno de Sanguinetti, el Frente Amplio tuvo participación en las empresas públicas. En el gobierno de Lacalle, en el segundo de Sanguinetti y en el de Batlle, no. Y en el gobierno de Mujica, la oposición sí participó...
—...y yo recuerdo que Lacalle, durante su gobierno, dijo que para integrar los organismos del Estado en su dirección, quienes participen tienen que estar de acuerdo con la política económica.
Desaparecidos
—Esta semana, usted deslizó que habrá alguna novedad sobre la cuestión de las personas desaparecidas durante la dictadura. ¿De qué se trata?
—Estoy trabajando el tema. En unos días voy a expresar algunos conceptos sobre el asunto. No tengo todo cerrado todavía y por eso hay que esperar un poco.
—¿Se han descubierto nuevos restos de desaparecidos?
—No, no.
—¿Entonces?
—Hay algunos reclamos de la sociedad civil y de organizaciones que ameritarían darle un nuevo empuje y un nuevo encare al trabajo para ver si se puede tener más conocimiento de lo que ha pasado con respecto a los desaparecidos.
—¿Habrá nuevas leyes o decretos sobre el tema?
—Disposiciones legales no. Simplemente, la voluntad política para generar espacios que puedan avanzar en ese tema. Tengo ideas y estoy trabajando en ellas, pero todavía no las tengo concretadas. Creo que para la semana que viene lo vamos a tener.
Fuente: Búsqueda
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