lunes, 14 de enero de 2013
TELULARES: PONEN NERVIOSOS A SINDICALISTAS URUGUAYOS
El 'telular', un sistema aplicado para transformar teléfonos fijos en celulares, promete convertirse en asunto de debate entre los operadores privados que defienden su uso, el sindicato de ANTEL que lo considera 'un disparate' y el Estado en donde el tema recién empieza a ser analizado.
El presidente del sindicato de ANTEL, Gabriel Molina, dijo a El Observador que el gremio pedirá una reunión con las autoridades de la Unidad Reguladora de los Servicios de Comunicación (URSEC) para “denunciar este disparate absolutamente violatorio de todas las normas que robustecen la presencia de ANTEL en el mercado”.
“Las empresas privadas no pueden hacer ese tipo de negocio que rompe con el monopolio de la telefonía y atenta contra decretos que tienen plena vigencia. Esto es ilegal”, agregó Molina.
Esta no es la primera vez que desde el Estado se le echa el ojo a la gestión de las telefónicas privadas Movistar y Claro. En el correr de 2012 el uso de la fibra óptica fue motivo de un enfrentamiento que incluso fue abordado a nivel diplomático (ver despiece).
Telular es en realidad una marca de plaza cuyo nombre se extendió a todos los aparatos que tienen su mismo uso. Técnicamente, un “telular” es un celular de base o de escritorio que se conecta a un teléfono convencional o a una central telefónica. “Reduce el gasto de realizar llamadas a celulares por las líneas fijas. Ofrece la ventaja de tener un celular en la red de extensiones del conmutador. Opera con chip de prepago o con plan tarifario”, dice uno de los tantos anuncios en internet que promocionan este aparato.
Es decir, ese teléfono de base desde el que se realizaban llamadas a celulares que luego facturaba ANTEL, se convierte, tras adicionarle el “telular” (ver foto), en un celular de una empresa privada que cobra por el servicio.
Operadores del sistema de comunicaciones dijeron a El Observador que se estima en unas 100.000 la cantidad de líneas “telulares” que funcionan en el país. Esto supone un movimiento de dinero aproximado entre US$ 36 millones a US$ 48 millones por año.
El presidente de la Cámara Nacional de Telecomunicaciones, José Pedro Derrégibus, dijo a El Observador que no hay ninguna ilegalidad en el uso de esa tecnología. “Un teléfono alámbrico puede ser usado fijo o móvil. Y uno móvil puede ser usado de manera fija. Puede parecer un juego de palabras pero nosotros no estamos usando ninguna tecnología de ANTEL. El telular es un teléfono celular. La diferencia con el celular convencional tiene que ver con la naturaleza del plan y con las tarifas”, dijo Derrégibus quien, además, es gerente de Movistar.
Por su parte, el gerente general de Claro, Horacio Alvarellos, prefirió guardar silencio. “No voy a hacer ninguna declaración al respecto”, dijo.
En tanto, el presidente de la URSEC, Gabriel Lombide, consideró que este tema debe ser abordado con detenimiento. “Cuando llegue el momento lo estudiaremos. Hasta ahora no hemos recibido ninguna denuncia concreta”, sostuvo.
El director nacional de Telecomunicaciones del Ministerio de Industria, Sergio de Cola, dijo que ese organismo también está a la espera de un planteo concreto.
Mercado.
Quienes cuestionan el uso del “telular” por considerarlo “ilegal” dicen que no hay dudas acerca de que este adminículo permite acceder a la telefonía celular utilizando, pero a la vez eludiendo, la telefonía fija.
Señalan que hay muchas empresas que contratan estos servicios y luego ofrecen el plan a sus empleados y estos a su vez se lo sugieren a sus familiares generando un vasto mercado.
Incluso, un informe jurídico que circula por oficinas del gobierno sostiene que el uso del “tutelar” excede las atribuciones de las telefónicas privadas. Luego de recordar que ANTEL tiene el monopolio de la telefonía básica, el informe concluye: “Lo propio del celular es su movilidad. En cambio, el telular es fijo. Perecería tratarse más bien de una interfase que posibilita una salida telefónica que requeriría del uso del espectro (de la telefonía fija)”.
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