El presidente de Ute, la empresa estatal gestionadora de la energía eléctrica en Uruguay, el Ingeniero Eléctrico Gonzalo Casaravilla, dijo al diario Ultimas Noticias que las cuentas de UTE están "balanceadas", lo que les permitió conformar el fondo para estabilizar las tarifas ante posibles crisis en el futuro.
El fondo estará pronto en un año y garantizará a las familias la estabilidad en los costos. El jerarca dijo que la utilización del gas natural es la alternativa que mejor se plantea para complementar la incorporación de energías renovables en el Uruguay y permitirá reducir costos en algunos puntos, como en el funcionamiento de la central de Punta del Tigre.
-¿Cuál es la prioridad de UTE para el quinquenio?
-El objetivo es el mismo de siempre, suministrar energía eléctrica en las mejores condiciones a la población. Dentro de eso, todas las actividades tanto la generación como la transmisión y distribución hay que atender de la misma forma. No se puede priorizar una.
Yo no puedo decir me voy a concentrar en mejorar las redes de distribución para llegar al 100% de la demanda, porque si después no tengo la energía o falta la forma de mandar la electricidad, el proceso queda incompleto. Es una cadena en la cual todos los elementos tienen que estar atendidos.
En este período si uno dice donde vamos a poner el énfasis, desde el punto de la inversión está en la parte de generación. Pero también está en la parte de transmisión. Vamos a hacer un despliegue de redes eléctricas para completar el territorio nacional.
Había muchos años de atrasos. No se inició en el período anterior porque teníamos muchísimos más atrasos en la parte de generación. Allí se pusieron las baterías.
-¿Cómo va a ser la tarea para electrificar a todo el país?
-Hoy la realidad es diferente a la de 5 años atrás. Podemos atacar la parte de la transmisión que tiene que ver con el desarrollo de la demanda que viene creciendo. Vamos a cambiar 60.000 postes de madera de electrificación rural.
Allí la tarea desde el punto de vista del personal no es complicada. La electrificación rural se va a hacer a través de líneas troncales.
Fuera del área electrificable, es decir la gente que está campo adentro, allí tenemos un sistema por el cual UTE pone los materiales básicos y los vecinos se organizan para contratar a una empresa que les hacen la línea.
Nosotros vamos a dar un apoyo grande, además después que está la línea necesitamos el personal para hacer el mantenimiento. Hablamos de líneas remotas; llegar y atender un cliente no es una tarea trivial. Realmente tenemos un costo muy grande en el mantenimiento de las redes rurales.
-¿Cuál es el costo del mantenimiento en el presupuesto de UTE?
-El patrimonio de la UTE es del orden de 5.000 millones de dólares. Lo razonable es por lo menos dedicar tres o cuatro puntos de tu patrimonio en mantener tus bienes. Si compraste determinadas líneas, hay que mantenerlas. Estamos hablando de 150 millones de dólares que hay que poner todos los años para mantener todo lo que tiene el ente.
La mitad de mi plan de inversiones (US$ 1.400 millones) tiene que ver con mantener lo que tengo. Estamos en un proyecto de incorporar de sustituir cable prensado. Hace 10 años que comenzamos a cambiar y tenemos para 10 años más para completar.
Este tipo de cable que es muy feo a la vista, pero que es muy seguro y da más garantías para la gente que anda por la vía pública.
-¿Que incidencia va a tener en UTE la llegada de la planta de regasificado de gas natural?
-La política de Estado es diversificar la matriz: vamos a incorporar energía eólica, el proyecto de la multipartidaria dijo al menos 300 megavatios. Decidimos instalar 500 megavatios.
También la multipartidaria habló de 200 megavatios por biomasa. Complementariamente vamos a incorporar una central de origen térmico y tenemos diferentes alternativas: una es el gas.
Hoy en día más que nada por la estabilidad que tiene, no tanto para el sector eléctrico sino para el país, parece ser la apuesta que tiene mejor perspectiva. Incluso mejor que el carbón.
Otra cosa que es menor, la reestabilización de las inversiones ya existentes. Hoy tenemos Punta del Tigre que funcionaría a gas si tuviéramos gas.
Es una central de base que hoy la hacemos correr con gasoil. Con el gas natural se reduce el costo de la planta. La ecuación parece mostrar que si se hacen todas estas cuentas andan muy parejas las dos (gas y carbón). Sería un empate técnico. Pero cuando se calculan las demás variables, gana el gas. Esto gracias a los proyectos con Bolivia y con Argentina por la regasificadora.
-¿En qué grado de avance está la interconexión eléctrica con Brasil?
-Ya arrancamos la construcción de la planta convertidora y ahora estamos esperado que se termine de votar el Focem (Fondo para la Convergencia Estructural del Mercosur) que nos financia parte de la línea que va desde San Carlos a Melo.
Ya tenemos cerrado el negocio con los brasileños en la línea que va de la frontera hacia su punto de conversión. Ahora tenemos que lanzar la licitación para la línea que une la convertidora y con la frontera.
El directorio de UTE ya aprobó el primer depósito para el fondeo de estabilización tarifaría. Se invirtió una cifra de US$ 100 millones.
Las autoridades del Ministerio de Economía (MEF) habían pedido al ente la posibilidad de bajar las tarifas como medida contra la inflación. Finalmente, primó la propuesta de la empresa estatal.
¿Cuándo quedará pronto para usar el fondo?
De acá a un año lo vamos a tener con la plata adecuada para el uso razonable. Hoy la empresa tiene las cuentas balanceadas y si redujera las tarifas no podría aportar al fondo.
Además, tenemos que pagar una deuda con Ancap a la que le debemos US$ 70 millones que serán pagados el año próximo.
¿Qué repercusiones tendrá la medida en las familias?
Al tener un fondo y plata guardada se generan ciertos intereses. Cuando esté la necesidad de dinero para atacar un problema, como puede ser una sequía, no hay que salir a buscar capital de urgencia.
No vamos a poder decir que las tarifas bajan tanto por ciento, pero la clave está en que la gente no va a notar efectos negativos. No tiene sentido andar subiendo y bajando las tarifas de acuerdo a cómo venga el agua.
Va a haber una mayor estabilización en el costo de las tarifas que la que tenemos hoy, cuando debemos andar bajando y subiendo en varios casos.
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